Servidora es muy fan de una drag queen, porque una drag queen, para mí, representa la creatividad, el buen humor, el estar ideala, la libertad, la tolerancia… ¿y quién no admiraría eso? Pero una drag queen de tan solo ocho años es que me vuelve loca ya. Así que cuando conocí la existencia de Queen Lactatia hasta se me saltaron las lágrimas de ver que todos estos valores que he nombrado antes ya están llegando a los más jóvenes y están sustituyendo todos los prejuicios y lastres que han pesado hasta hace bien poco (y en muchíiiiisimas partes aún siguen pesando) sobre la figura de las drag queens.

Queen Lactatia, con tan solo ocho años, ha tenido ya la valentía suficiente (otro de los valores más característicos de una drag) para hacer lo que más le gusta: crear un personaje femenino para expresar lo que siente. Lo malo es que, a tan corta edad, ya ha tenido que aprender lo que significa ser diferente. Desde que apareció en las redes sociales, muchísimas personas han sentido la necesidad vital de decirle a sus padres que, por favor, qué coño están haciendo con su hijo.

Pues supongo que estarán haciendo lo que cualquier padre haría: querer y apoyar a tu hijo y ayudarle a conseguir aquello que quiere. A pesar de todo, Queen Lactatia es tan queen que ya tiene una lección que darnos a todos: «por cada persona que me odia tengo a un montón de gente que me defiende».

https://youtu.be/I6XTmAlOuY8

Fue bautizada con su drag name por su hermana, lo cual demuestra el apoyo tan grande que recibe por parte de su familia. Además, su madre la acompaña a todos los shows a los que es invitada y es también quien la ayuda con el maquillaje y los looks que la misma Lactatia elige. Por si fuera poco, su familia drag ha recibido a esta nueva y joven incorporación con los brazos abiertos, y hasta la mismísima Bianca del Rio quiso compartir su escenario con ella (y Lactatia, con la sinceridad por delante, ¡fue capaz de decirle a la mismísima Bianca que no era su drag queen favorita!).

En una reciente entrevista Lactatia declaró: «pienso que cualquiera puede hacer lo que quiera en la vida, no importa lo que otros piensen. Si quieres ser una drag queen y tus padres no te dejan, necesitas nuevos padres. Si quieres ser drag queen y a tus amigos no les agrada, necesitas nuevos amigos».

Es un gustazo saber que alguien tan joven ya ha sido capaz de aprender una de las lecciones más importantes de la vida: sé tú mismo, lucha por lo que quieres y rodéate solamente de la gente que se preocupa por ti y te quiere. Seamos sinceras con nosotras mismas: ¿quién no hubiera deseado tener las cosas tan claras a los ocho años? Estamos muertas de envidia (de la buena) y amor por ella.

¡Larga vida a Queen Lactatia!