¿Sabéis esas frases que cuando os las dicen os quedáis como con cara de pocker pensando… ‘pues para decirme esto, mejor te hubieses callado‘? Pues este año me he plantado. No más frases vacías y sin sentido en mi vida. A tomar por saco lo de ser políticamente correcto. El próximo o la próxima que me diga alguna de estas frases que huya haciendo la croqueta o que se atenga a las consecuencias.

Ahí van:

1. No te preocupes

Vamos a ver, ¿que no me preocupe por qué? En el momento en el que te estoy contando algo es porque YA estoy preocupada, porque busco soluciones o porque simplemente me quiero desahogar contigo. No me digas que no me preocupe simplemente porque no tienes absolutamente nada mejor que decir; porque todos sabemos que cuando te dicen eso es o porque se la suda completamente lo que les estás contando o porque no tienen nada mejor que contestarte. ‘Tía, creo que mi novio me está poniendo toda la cornamenta’. ‘No te preocupes, mujer’. ‘Joder, gracias, gracias de corazón, fijo que ya no me preocupo más’. En serio, BASTA.

2. A ver si nos vemos

No, ‘a ver si nos vemos’ NO. Dime dónde y cuándo nos vemos. Hora, fecha y lugar. Porque si realmente quieres ver a alguien, lo ves; no te andas con excusas. El ‘a ver si nos vemos‘ es la forma más bonita de decirle a alguien que pasas absolutamente de cambiar tus planes y organizar tu vida para sacar un hueco para disfrutar de su compañía. Esto es así y lo sabéis.

3. No me pasa nada

Sí, sí que te pasa; lo que pasa es que no te da la gana contármelo. Dime que sí que te pasa pero que estás tan sumamente cabreado que vas a hacerme sufrir hasta que yo sola adivine qué narices te he hecho; pero no me digas que no te pasa nada. A mi con remoloneos no ¡eh!

4. ¿Has pensado alguna vez en hacer dieta?

No mira, nunca lo he pensado. Soy gorda desde que nací pero he vivido en la inopia todo este tiempo. ¿En serio la gente se plantea hacer este tipo de preguntas cuando ve a una gorda?. ¿En serio os pensáis que vivimos en el mundo de yuppi y lo de hacer dieta y deporte es algo que nos suena a chino? No lo creo; lo que sí que creo es que os pensáis que vais a venir a solucionarnos la vida con vuestros consejos maravillosos como el de, ‘nah si con quitarte el pan ya lo tienes hecho‘. Pues mira no; no tienes ni idea de cómo funciona mi metabolismo ni de las 763 veces que he intentado hacer dieta, así que por favor, ahórrate tu falsa preocupación y déjate de tonterías.

5. Esa es una guarra

Pero bueno, pero bueno, pero bueno… ¡Ya está bien de juzgar a las personas tan a la ligera! Esa es una guarra, ¿por qué? ¿Porque ha decidido vivir su vida libremente y sin ataduras?, ¿Porque ella es la que decide con quién se acuesta y con quién se levanta?, ¿Porque pasa olímpicamente de lo que opinen los demás? Mordámonos la lengua un poquito antes de hablar, amichis.

6. Tampoco es para tanto

Otra frase maravillosa para erradicar de vuestro discurso. Vamos a ver, ya decidiré yo si es o no para tanto ¿no? Me pone muy nerviosi que la gente decida lo que es importante o no en mi vida. Para mí puede ser un mundo lo que para ti resulta ser una tontería. No todos tenemos los mismos valores, ni las mismas implicaciones emocionales, ni mucho menos, el mismo aguante. Así que, deja de decirme que no es para tanto, por favor.

7. Con lo guapa que eres de cara…

… y lo fea que eres del resto, ¿no? ¿O cómo va esto? Si soy guapa, soy guapa de todo. Guapa de cara, de culo, de barriga y hasta de uñas de los pies. Stop a los piropos envenenados, please.

8. Aparecerá alguien cuando menos te lo esperes

Pues me he cansado de esperar. Y de escucharte también. Que yo me se de una que se murió así… esperando y esperando. Yo soy de las que piensas que, como decía mi abuela: el que quiera peces que se moje el culo; así que no me da la gana dormirme en los laureles. Si quiero algo, lo busco. Otra cosa es que si no lo encuentras te hagas el harakiri, que tampoco es plan. Calma y relax.

9. Todos los políticos son iguales

Pues mira no. No todos son iguales, ni se parecen. Con esta actitud lo único que conseguimos es que todo siga igual; independientemente de tu ideología.

10. No puedo

Y esta va por mí. Este año me he prohibido utilizar el ‘no puedo‘ como excusa. Me permito dudar, caerme, estar de bajón, pero solo con la condición de volver a levantarme. Una, dos o 459 veces, las que haga falta.