Bueno, amigas, ahora no os vayáis a hacer las inocentes. Todas alguna vez en la vida nos hemos cogido un pedo y todas la hemos liado.

No, yo no porque no bebo y voy a quejarme de que sois unas gordas borrachas

Pues no sigas leyendo o sí para poder insultarnos con más fundamento. Pero el resto podéis ir tachando cuales sí y a ver quién gana.

  1. La vez aquella que llegaste a casa sin zapatos, sin cartera y  con los restos de dignidad que te quedaban arrastrando.
  2. Ese día que tuviste un blackout total y te llevaron a rastras y pasaron muchas cosas por el camino, que lo mismo son verdad o no. No tienes ni idea y nunca lo sabrás.
  3. La noche que te creías una participante de RuPaul y no parabas de hacer lipsync for your life hasta que te rompiste un tobillo.
  4. La mañana que llegaste a dormir a tu casa y te llamó tu hermana porque llegabas tarde a cuidar a tus sobrinos «¿te acuerdas de que habíamos quedado no?»
  5. Esa boda en la que nadie se acuerda ni qué comieron pero hasta el último primo de la novia, se acuerda de ti.
  6. El domingo en que no paraste de recibir mensajes en los que ponían «ayer a gusto ¿no?» de gente con la que ni recordabas haber hablado.
  7. Esa noche que te sentías sincera y le dijiste a varias personas que en realidad te caen como el culo, pero eres muy educada y les sigues saludando aunque te den asco. Al día siguiente te habían sacado de varios grupos de whatsapp y te sentiste bastante aliviada, en realidad.
  8. Esa noche que te sentías un poco hooligan y acabaste peleándote con todo el mundo, porteros de discoteca incluidos.
  9. El día que te despertaste con la ropa puesta y no era la tuya.
  10. El día que te despertaste sin ropa y no sabías dónde estaba y tampoco tenías muy claro quién dormía al lado.
  11. El día que te despertaste en un sofá ajeno y no sabías quién era nadie, pero ellos tampoco tenían muy claro quién eras tú.
  12. La noche que tenías mucha hambre y te compraste ocho pizzas. Y te las comiste. Y las vomitaste en el pasillo.
  13. La mañana esa con el after ese que te costó el alquiler.
  14. La noche en la que fuiste a tu bar de siempre y te dijeron que ya no eres bienvenida. PERO NO SABES POR QUÉ.