En Weloversize nos dedicamos a hacernos eco de muchas cosas, y no sólo de aquellas relacionadas con las gordas, los problemas de autoestima, la moda para todas las tallas, etc. Sino que también nos gusta manteneros bien informadas de cuanto invento loco y, a la vez, útil, se nos aparece en las noticias. Y es que, con estos calores, más de una tenemos que sufrir cada día que la peña vaya por la calle apestando mucho más de lo habitual. Todo se concentra el doble, el metro huele a choto x20000 y se hace insoportable el camino al curro o a casa. Porque claro, si no estás de vacaciones en la playa y tienes que ir a trabajar en pleno agosto a 300 grados, enfundarte en tu traje o en tu ropa negra y zapatos cerrados con calcetines (como es mi caso, ya que en El Corte Inglés no hay estaciones y el uniforme es el mismo de Enero a Diciembre), sabes que toca sufrir el peste a humanidad que desprenden algunos y algunas, y que con el calor se acentúa.
Pero ¡tranquilas! Que ya están aquí los japoneses para solucionarnos la vida,y es que han inventado el KunKun Body: Un chisme que te avisa cuando estás sudando más de la cuenta y en breve vas a empezar a desprender un nada agradable olorcillo a cebolla. ¿Qué les parece?
Pues a mí me parece un inventazo, y es que ¡cuando decimos que los japoneses nos llevan años de ventaja es por algo! Por lo visto el aparatejo se activa conectándolo al móvil y, a través de la App correspondiente, te detecta si tienes los sobacos como el Aquapark. Sólo tienes que acercártelo a las zonas susceptibles de estudio: nuca, axilas, detrás de las orejas y, por supuesto, los piesitos. Mediante la app sabremos cómo de chunga está la cosa y nos dirá el nivel de intensidad: Desde ‘todo ok’ hasta ‘se necesita cuidado inmediato’, lo que yo calculo que en la versión española, de haberla, se traduciría como ‘vete a lavarte ya, so guarro’.
Así que nada, o aprovechamos este año para cumplir el sueño de viajar a Japón y nos traemos unos chismillos de estos para venderlos a tope en Wallapop, o toca esperar a que algún alma caritativa decida ampliar el mercado hasta nuestras tierras, o al menos que lo vendan online. Mientras tanto, no nos queda otra que seguir soportando los aromas maravillosos que nos deja el sudor en verano y confiar en el poder del desodorante, ¡si es que se lo ponen!… ooooouuuuu yessss!
