Si hace unos días os hablábamos de una medio buena noticia de Zara de la que no terminábamos de fiarnos, ahora otra tienda de Inditex, esta vez Oysho, vuelve a demostrarnos que estas iniciativas no son más que pequeños parches a la actitud antidiversidad del grupo Inditex.

A través de la artista Yolanda Domínguez, descubrimos los nuevos maniquíes de Oysho. Unos maniquíes delgados, por supuesto que no iban a ser de otra manera en una tienda de Amancio. Pero por si no queda suficientemente claro que son delgados, estos nuevos maniquíes traen las costillas bien visibles y los huesos de la cadera bien marcados. Poca carne, mucho hueso. Como dice Yolanda, están literalmente en los huesos.

Así pues, la ropa se exhibe sobre cuerpos muy delgados, como diciendo o más bien, diciendo: aquí solo nos gustáis así. De hecho, ya sabemos que no vamos a encontrar ropa interior de nuestra talla, ni nuestros enormes culos, ni siquiera nuestros pechos grandes, son bienvenidos en la lencería de Inditex.

Tampoco es que nos sorprenda. Estos maniquíes en realidad van a conjunto con sus limitadas tallas y la poca variedad de las modelos de sus campañas. Por mucho que nos quieran vender que están abriéndose a la diversidad con acciones totalmente puntuales, incluyendo a tres modelos mayores de 40 o usando modelos despeinadas con aparato, sabemos que la realidad está en las tiendas. Y en las tiendas hay lo que hay: ropa para mujeres que no pasen de la 42, 44 como mucho. Muchísimas prendas en tallas únicas o únicamente en las aleatorias S, M, L. Y sus maniquíes claro. Que oye, claro que hay mujeres así y deben ser representadas. El tema es que en este grupo parece que son las únicas que merecen ser representadas. Como bien dice Yolanda Domínguez, si quieren ser más realistas, al menos que les pongan estrías, pelos, granos.

Ya sabes, la próxima vez que vuelvas a leer en alguna web de moda que Zara apuesta por la diversidad o las curvas (JAJAJAJA), acuérdate de estos maniquíes y de la realidad de las tallas en todas y cada de las tiendas de la cadena amancia.