Esta es una pregunta que me he hecho desde siempre. Porque yo trabajo todo el día con mujeres, y sigo escuchando una y otra vez lo de: “Ayer tuve una primera cita y pedí ensalada” O “Comí antes de salir de casa para luego comer menos”. O “Come poco en tu cita  y no pidas postre”.

Porque hay una  ley ancestral que dice que él,  aunque tenga curva de la felicidad (si, es esa capa de grasa que se acumula en la zona abdominal y que en mujer se llama lorza, pero en ellos es más cuqui) se puede permitir comerse una pizza y una tarta Sacher de postre. ¡Pero tú no!

Hola, solo como tomates y así soy más sexy.
Al parecer la razón es que comer poco hace parecer más atractiva. No sé quién narices se inventó esta cosa tan absurda, ¿sería algún tío tacaño que en la época en que ellos pagaban, querría pagar menos?.

Pero que hoy en día siga siendo así, es básicamente por dos premisas firmemente establecidas en nuestra sociedad: que la delgadez es atractiva y que la gente delgada come poco.

Y aunque  es otra norma ilógica que no tiene ningún sentido. Hace un papel sumamente importante para que la mayoría de mujeres jamás puedan disfrutar de comer, por lo menos en público.

 Yo creo que a todas, delgadas o gordas,  alguna vez nos ha dado vergüenza comer en público, o hemos parado aunque aún comeríamos algo más por ese miedo a no parecer una zampabollos (Gracias a Dios a partir de los 40 te resbala todo y peleas por la última croqueta, os dejo un halo de esperanza a las que aún no hayáis llegado).

 Cuando sales con gente a comer, si comes súper sano, si eres delgada pensarán que comes así para no engordar, y si eres gorda, pensarán que comes sano para intentar parecer que estás a dieta o te cuidas. Y si comes en exceso, si eres gorda pensarán que solo comes de eso y por eso estas así, y si eres flaca que estás haciendo el paripé para fastidiar al resto, ya que nunca comes de eso en tu casa. Llegados a este punto la única solución es: “Que comas lo que te salga del chirri, porque va a estar mal hagas lo que hagas”.


Así que bajo esa ley que nadie pronuncia pero que existe y está presente,  las mujeres debemos alimentarnos como pajaritos en la sociedad actual, pero por otro lado trabajar ocho horas, ocuparnos de los hijos, la casa, las parejas… y eso con una hoja de lechuga y un tomate en el cuerpo. ¿Pero qué pasa? ¿Qué invento es este?.

Así que mi consejo es que comáis lo que os apetezca cuando estéis con gente y sobre todo  en vuestras citas, y si la pareja que tenéis delante tiene personalidad y vale la pena, no estará pendiente de esto. Y si no le gusta, es que tenéis que decir “next”.

La que está escribiendo esto se comió una hamburguesa con patatas en su primera cita, y un helado de postre, sin compartir, para mi sola,  y encontró al amor de su vida.