Facebook ya no es lo que era. Y lo digo muy en serio.

Antes era divertido, podías chafardear…a tus amigos, a tus enemigos…todo el mundo lo utilizaba, los perfiles eran casi públicos y daban pie a esa maravillosa actividad que nos encanta en un país tan adicto al cotilleo como el nuestro.

Ahora, aunque todos decimos “No, yo ahora apenas uso Facebook”, la realidad es que la mayoría lo seguimos usando igual que antes intentando fisgonear todo lo posible en nuestras horas muertas, pero eso sí…nuestro ratio de actualización de estado es muchísimo menor y subimos infinitamente menos fotos. El contenido en general es bastante más coñazo, lleno de artículos compartidos, fotos con frases motivadoras y cosas del estilo. Y no ayuda tampoco el hecho de que la gente de nuestro entorno  nos sature el muro de noticias con fotos de bodas y bebés y páginas sobre todo tipo de actividades de puericultura y consejos para la paternidad. Me supera.

Puede que esto, además del desgaste que produce el tiempo en cualquier red social (véase myspace, fotolog, messenger…) que tarde o temprano hace que acabe siendo sustituida por otra u otras redes más novedosas, más interesantes, más “de moda”…, se haya visito influenciado por el continuo cambio en las condiciones del servicio, la falta de novedades o una más que patente búsqueda de beneficios para sus inversores y sobre todo (sobre todo) la continua invasión de nuestra privacidad.

Que conste que yo siempre he sido una defensora del maldito-cara-libro porque desde hace ya unos cuantos años estoy dando vueltas por el mundo y he vivido en muchos sitios distintos al que me vio nacer. Por eso siempre me ha parecido una manera fantástica para seguir en contacto con mis amigos, desperdigados a lo largo y ancho del planeta, y seguir al tanto de sus vidas…y a la vez una forma de poder reconectar con amigos que por razones varias habían desaparecido de mi vida a.d.f. (antes de Facebook)

Sin embargo, éste no es realmente el tema que me ocupa hoy.

La cosa es que últimamente me he empezado a dar cuenta de un hecho que me hace ponerme un poco nerviosa. Muy nerviosa. Resulta que he empezado a fijarme en eso de “personas sugeridas” más por el aburrimiento que me produce el muro de FB últimamente (exceptuando por nuestro chat de WeLoversizers ;) ) y me he empezado a dar cuenta de que entre estas sugerencias  sólo aparecen cierto tipo de personas:

  • Gente que no conozco de nada, pero que son amigos-de-amigos

tumblr_m9zw7iItej1qkh45oo1_500

  • Gente que no conozco de nada pero fueron a mi colegio o mi universidad

well...no! no no no

  • Gente de mi lista de e-mails que conozco menos que más

nicole-x-factor puffff qué pereza!

  • Antiguos rolletes o ex- que conocí demasiado o desearía no haber conocido nunca, y con los cuáles no me une ninguna relación salvo algún número de teléfono que aún no haya borrado.

tumblr_menvm9GfyA1qedh5ho1_500

En el caso de los 3 primeros tipos, pues bueno, entiendo que dentro de la red social y de sus algoritmos e historias varias para hacer sugerencias, tiene su lógica que me sugiera amigos de amigos (con los que ya tengo más amigos en común); o gente que fue a mi escuela o facultad (me cuesta más de entender, pero tiene alguna relación…); o el caso de la lista de emails por eso de cuándo al principio te pedía acceder a tu lista de contactos para ver qué amigos tenías en la red (ésta ya me preocupa un poco más porque veo que no sólo se tenían en cuenta aquellos que figuraban en tu lista en el momento en el que te unías a la red y lo revisabas, sino que gente que aparece después también y esto ya no lo entiendo tanto).

Pero ¿y el punto 4? ¿en serio? Que digo yo…ehmmm, vamos a ver, señor Facebook: lo de que sean mis ex y los haya borrado… ¿no te dice nada? ¿Por qué me los vuelves a sugerir? ¿Consideras que me he equivocado en mi decisión? ¿Crees que habrá cambiado? ¿Sugieres que él también se arrepiente? ¿Piensas que debemos darnos una segunda oportunidad? Porque yo NO. Y tengo las cosas bastante claras, llámame rara.

tumblr_inline_mijcmipPxd1qz4rgp

Y ya si hablamos de los que no son ni siquiera EX, que son solo “amiguitos especiales” independientemente de la frecuencia de reincidencia o la ausencia de ella; o de rolletes esporádicos y anecdóticos…me preocupa todavía más, señor Facebook!! Porque no sé qué es lo que me da más yuyu, si el hecho de que esto sea un indicio de que se esté acabando el cupo de tíos para que me tengan que salir repetidos en las sugerencias, o el hecho de que Facebook se acuerde de cosas que NI YO misma me acuerdo que ocurrieron…

Creepy

Como con casi todo este tipo de cosas rarunas, al comentarlo con amigas me he dado cuenta que este hecho y consiguiente alarma-horror-espanto  provoca en todo aquél a quién le sucede la misma reacción de indignación e investigando sobre el tema para poder escribir este post, he descubierto que desde que Don FB es poseedor de Instagram, de whatsapp… y que además nosotros interactuamos en él a través del uso de su aplicación móvil, automáticamente tiene acceso a nuestros contactos en dichas redes y a nuestra agenda de teléfono.

Así que aunque no tengas registrado tu teléfono (como es el caso de una servidora) ni prácticamente ninguna referencia en el perfil de FB, y hayas limitado al máximo los datos proporcionados con el mínimo de información personal…ten en cuenta que  sólo por utilizar la app  desde nuestro smartphone le estamos dando acceso a enviarnos sugerencia de contactar con todo aquello o aquéllos que habíamos querido borrar de nuestra memoria,  si es que tuvimos la torpeza de olvidarnos de eliminarlos de nuestra agenda de teléfonos.

Se abre el debate.