Ya sabéis que en WeLoversize nos apuntamos a un bombardeo. Si encima la idea es tan sencilla, bonita y necesaria, pues con más motivo. Todavía sigue siendo muy importante reivindicar el papel de las mujeres en el mundo del arte y la literatura; no solo como creadoras (que también, evidentemente), también como personajes que han sido relegados a papeles secundarios o extremadamente estereotipados y centrados en el cuidado y el deleite masculino.

El test de Bechdel se ha convertido en una herramienta que puede ayudarnos a medir el nivel de desigualdad (en clave de género) de una película. Solo es necesario que se cumplan las siguientes condiciones: deben aparecer por lo menos dos mujeres con nombre propio, éstas deben hablar entre ellas y la conversación no puede girar en torno a una figura masculina. Pero, aunque muy interesante y práctico, el test de Bechdel es demasiado básico y se deja sutilezas (que reafirman la brecha entre hombres y mujeres) en los márgenes. Por eso las iniciativas como #VisibilizaciónEnLaFicción, que es un proyecto de @sumlarfeminismo, son el complemento perfecto para reivindicar todos esos personajes femeninos que han quedado sepultados por el desarrollo del patriarcado.

El objetivo es dar visibilidad a la mujer en el cine, el arte, el teatro, la literatura, los videojuegos, etc… y lo único que hay que hacer es escoger un personaje femenino (tu favorito, da igual sus características) y dedicarle todo el día 29 de diciembre en tus redes sociales. Adoptar su nombre y una imagen suya como foto de perfil, dar datos sobre ella e incluso actuar como tu elegida haría en su ficción. Se trata de conseguir que #VisibilizaciónEnLaFiccón sea trending topic y que esta perfomance virtual llegue a cuantas más personas mejor. Yo ya me he puesto a pensar en mis mujeres favoritas de la ficción y he conseguido resumirlas en un top five que me representa mucho…

Enid Coleslaw es una de las protagonistas de Ghost World (cómic y película) y es maravillosa toda ella. Una adolescente que rompe con muchos estereotipos sexistas: borde, inteligente, existencialista… y referente para todas esas chicas que nos hemos sentido incomprendidas por nuestra manera de ver la vida. Vale que, como en la mayoría de las veces, es un perfil creado por un hombre y que, encima, en este caso dicen que es una proyección del propio Daniel Clowes (es más, el nombre de personaje y creador están formados por las mismas letras), pero no es más que la confirmación de que las cosas hechas con buen gusto y algo de sensibilidad, funcionan.

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Claire Fisher, otra como Enid. A lo mejor es solo cosa mía, que me gustan las personas con un puntito de desequilibrio atormentado, pero me parece magnética en todas sus contradicciones. A lo mejor es que siempre he querido resultar tan interesante como ella. A lo mejor es el aura de toda la serie lo que me hipnotiza. Sea lo que fuere, Claire es uno de los personajes de ficción con más encanto de la pequeña pantalla. En general todas las mujeres de «A dos metros bajo tierra» tienen una fuerza tragicómica que engancha mogollón, porque lo de Brenda también es algo épico.

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Sordideces a parte, Nomi Malone es una mujer de la que no sabemos mucho, solo que es una luchadora nata que está dispuesta a hacer lo que sea necesario para conseguir sus objetivos. El papel de Elisabeth Berkley esta al nivel de la Natalie Portman de Cisne Negro o de la Isabelle Huppert de La Pianista (dos grandes -enormes- a reivindicar también), pero más sobre actuada y llena de lentejuelas.

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Emily Gilmore es una de las mujeres que más me hacen reír de la ficción. Su nivel de maldad está muy por encima de la media y, encima, se hace la digna mejor que nadie. Amor muy a tope. No deja de ser un estereotipo con patas pero, al verse obligada a salir de su zona de confort para poder entenderse con su hija, nos muestra toda la complejidad del ser humano (al margen de raza, sexo, clase…).

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Susan Vance, la protagonista de «La fiera de mi niña», rompe totalmente con todos los clichés femeninos de la edad dorada de Hollywood. Aunque se trate de la típica comedia romántica de chicoconocechicaypasancosashastaqueseenamoran, hay que procurar interpretarla teniendo muy presente el momento en el que fue rodada. La maravillosa Katherine Hepburn interpreta a una joven alocada, despistada y disfrutona, que toma la iniciativa a la hora de conquistar al hombre que desea. Desde luego no es un papel habitual para una mujer de aquella época

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¿Hay mejor manera que acabar el año con una reivindicación tan molona y divertida? ¿A quién vais a escoger vosotras?