Me gusta más un día de fiesta que comer con los dedos. Me gusta Navidad, Semana Santa, Halloween, Carnaval y todo lo que me echen. Me gustan las celebraciones, compartir emociones y provocar sonrisas. Por eso aunque algunos digan que es una americanada, yo me hice fan del Black Friday desde el primer momento.
Que vale, lamentablemente no es festivo y tenemos que ir a trabajar, pero con los descuentitos a los que podemos acceder en este día tan maravilloso, se me quitan todos los malos.
Todavía estamos a 22 de septiembre pero es inevitable tener ya la cabeza en el Black Friday y las cosas que pretendo comprarme. Solo quedan dos meses para el evento comercial más TOP del mundo y me entretengo haciendo listas infinitas.
Este años los chicos de Cuponation nos piden una ayudita,y es que están interesados en entender los deseos y necesidades de los consumidores en esta fecha. Quieren entender cómo la moda y los amantes de la belleza planean comprar y ahorrar y de qué manera el Black Friday ha logrado cambiar la industria.