Las bragas superan en ventas en tangas en los últimos años. Ya os lo veníamos contando desde hace tiempo y parece ser que la tendencia crece: arriba las bragas de abuela, abajo los tangas. Según cuenta Grazia, en España las ventas de estas prendas (asesinas) en Women’Secret ha descendido en un 4% mientras que las bragas más grandes y las brasileñas anchas, han crecido un 6% y un 9%.

Y yo que soy del team braga de todalavida, pues no me puedo alegrar más. ¿Y por qué la gente está dejando de comprar tangas? Pues básicamente porque ya no está de moda, pero ¿por qué no está de moda? Pues porque, afortunadamente, cada vez está más ‘de moda’ , sentirse guapa porque sí, vestirnos para nosotras y no para gustar a otros, molarnos a nosotras mismas, pasando de someternos a torturas con tangas hilos. Por fin, la industria nos ha escuchado y está haciendo lencería bonita, no retorcida, sí cómoda, no ‘sexy’ para otros, sí para vernos tremendas nosotras mismas.

 bragas2Un montón de tiras feas y a precio de oro, ¡lo mejor y más confortable!

Ahora a todas nos parece muy bien todo esto que os cuento, pero hace unos años cuando decía eso de ‘yo no llevo nunca tanga’, la gente te miraba en plan ‘uy, qué mojigata’ y por supuesto nadie entendía por qué. ‘Si son súper cómodoooosssss’. Sí, comodísimo llevar la nalga rozando el pantalón vaquero, con lo suave y confortable que es el tejido denim. Además, un big No para el tanga es que me es imposible separar esa imagen tan dosmilera de las tiras del tanga asomando por el vaquero. Chonialert.

Así que ahora que las chicas nos estamos dando cuenta de que todo pasa, incluido el furor tanguil, me siento muy reconfortada y me río malvadamente al ver la braga de abuela que siempre defendí ¡está triunfando!

Porque ya ni las brasileñas, que parece ser que son las que más triunfan en España, aquí lo que nos gusta es la braga de abuela. Las brasileñas tampoco son tan cómodas como nos las venden: siempre se acaban metiendo por dónde no deben. Y si tienes un michelín más o menos majo, que es dónde se supone que se queda la tira de la braga, nunca sabes cómo ponerla, porque ahí no se queda quieta. Esto con el tanga ya era un auténtico drama totalmente inevitable y no se arregla con la braga brasileña.

Ahora puedes tener a Ryan Gosling más cerca que nunca

Pero ¡ah! la braga de abuela, las maravillosas full briefs del Primark. Un día las compré confundida y pensé ‘joder, me he comprado bragas de hospital’, las usé porque no estamos para tirar 4 euros a la basura y volví a por dos paquetes más. Qué maravilla, qué comodidad, ni un roce del vaquero, ni una braga metida por el orto, nada, comodidad, quietas. Vale, que son feas o más bien, muy básicas. Las negras están bien. Y las blancas de hospital, pues perfectas por si tienes un accidente.

Pero es que ahora ya tenemos millones de opciones, preciosis, estampadas, con encajes, plumeti, etc. Cuando pruebas una braga de abuela, ya no puedes parar, te sientes feliz, cómoda, con todo bien cubierto por una braga bonita de lunares. ¿Quién prefiere un hilo feo y metido por el culete? Nadie. Por eso la braga de abuela ha arrasado. Bye, tangas.