Así comienza el mensaje de empoderamiento que Ashley Graham dio el pasado miércoles en el evento organizado por la revista Glamour para el Día Internacional de la Niña. El evento, reunió a 300 chicas de 16 y 17 años en una mañana interactiva llena de charlas y presentaciones diseñadas para abordar los problemas sociales, culturales y políticos que enfrentan las niñas todos los días en la escuela.
Como bien sabemos ya las adeptas a We Lover Size, AG es la heroína number one en cuanto a romper moldes en la industria de la moda a base de curvas. Moldes que hasta ahora determinaban a través del tamaño de nuestros pechos y caderas, si entrabamos o no en su mundo de pasarelas y portadas. Moldes establecidos por gente tan poderosa y con tan pocas miras que hacía falta una época y unas mujeres como las de hoy en día para romperlas, mujeres como Graham. De forma valiente, apasionada, bella e inteligente, la modelo habló sobre la confianza del cuerpo, las rupturas y el amor propio en el evento. Dando de esta manera las herramientas necesarias para crear nuestra propia belleza interior, confianza y seguridad en nosotras mismas.
«No estoy aquí para hacerte sentir bella, sea lo que sea que eso signifique, estoy aquí para hacerte comprender que la verdadera belleza es estar bien con lo que eres. Estar bien con quien eres es un acto revolucionario. ¿Y hacer que alguien más se sienta bien con quiénes son? Eso es francamente heroico «.
Entre risas y gritos la modelo contaba anécdotas e historias para intentar concienciar a las jóvenes que habían asistido al evento de lo importante que es tenerse a una misma como prioridad: «Me dijo que teníamos que romper porque no iba a tener relaciones sexuales con él», dice Graham a la audiencia, que casi todos gritan desmayados por la revelación. «¡Pero espera!», Dice Graham. «La segunda razón fue porque dijo que iba a ser tan gorda como su madre».

Graham también contó cómo en su niñez tuvo que sobrellevar junto con sus padres un diagnóstico de dislexia y ADD que afectaron su crecimiento, y que le constaría años de terapia. «Me diagnosticaron una mala dislexia y ADD, y fue algo que mi madre y mi padre no sabían manejar«, dijo Ashley. Señaló que la educación y la atención personalizada pueden ayudar a otros niños en la misma situación a alcanzar su máximo potencial.

En la charla también dejó caer unas bombas de verdad inolvidables que todas deberíamos apuntarnos en el espejo para poder usar de mantra cada mañana:
«Lo que sea que otra persona piense que es incorrecto sobre ti, ya sea tu opinión o tu cuerpo, es en realidad tu súper poder».
«Quiero que pases por alto todo el drama, todas las dudas de ti mismo que yo también pasé, y llegar a lo bueno de ser nuestro propio dueño y amar quien eres».
«Sois la llave de vuestra propia felicidad».
«Este es un gran lugar para descubrir lo que amas».
«La felicidad viene, de hacer lo que uno ama».

Liza Peter