En un ataque de sinceridad os diré que no sigo muchos blogs. Me da por temporadas, a algunos me aficiono puntualmente pero siempre me acaba aburriendo su contenido y los acabo borrando de mi listado de favoritos. Sin embargo hay una mujer que me tiene enganchada a su vida desde que el mundo es mundo, o más bien, desde que Internet es Internet. Ella es Naomi, aunque su marido Josh la llama cariñosamente Taza y de ahí viene el nombre original del blog: Taza and husband. Lo que empezó como una afición se ha convertido en todo un negocio y esta pareja ha conseguido algo esencial a la vez que complicado: que todos queramos tener su vida.
Naomi y Josh eran una adorable pareja de novios cuando todo comenzó. Ambos destacaban por cuidar las fotos al detalle y por tener estilos impecables. Se casaron en 2007 y no dudaron en compartir con el mundo los preparativos de su boda y las fotos del enlace. Todo tan perfecto como siempre. La llegada al mundo de sus hijos Eleanor y Samson no hizo más que aumentar la expectación por un blog que ya estaba en auge.
Ya no entras solo para ver el último modelito de Naomi para ir a por cupcakes a la Quinta Avenida, es que ahora sigues la evolución de los peques casi como si fueran tuyos. Han atrapado a millones de usuarios en todo el mundo que siguen sus vidas cual Gran Hermano y suspiran en alto que si hay una familia perfecta, esa es la de ellos.
Ojo, mi admiración por ellos viene precisamente por eso. Porque sé que la clave de un blog de éxito está en transmitir un imaginario ideal en el que todo parece sumamente perfecto aunque en el momento en el que apagas la cámara de fotos tu hija te vomite encima y el pequeño se caiga por las escaleras. En el momento del click, todos sonríen, todo es colorido, todo es negocio.
Los niños van vestidos siempre perfectos, su casa está decorada a las mil maravillas y encima cocinan pasteles de colores constantemente. Si estás preparado para conocer a la familia ideal y no morir de la envidia. Te presentamos a los Davies, ¡adelante!
