El “Amigas para siempre” o “Friends Forever” en el que creíamos ciegamente en nuestros años mozos ha pasado a mejor vida. Esa amistad en la que hubieras confiado tu labial preferido se ha marchado y tú no sabes cómo afrontarlo. Tranquila, es totalmente normal, a veces el drama por perder a una amiga puede ser tan difícil como la ruptura con una pareja.
El primer paso para superar una ruptura con una amiga es darte cuenta de que esa chica ahora es tu ex amiga. Bien puede haber sido una ruptura en seco como cuando te metes la máscara de pestañas en el ojo o algo progresivo que se ha ido perdiendo poco a poco y es más difícil de identificar. Si ya no piensas en acudir a ella cuando tienes un problemón, cuando encuentras un chollazo en las rebajas o cuando has quedado por fin con el pivón de tu escalera, confirmado: ya no es tu amiga.
Una vez aceptado superarlo es lo siguiente. El tiempo es tu mejor aliado. Con él verás que igual no era tan necesaria en tu vida y que lo que ha pasado es la mejor opción, porque las amigas de verdad están ahí para siempre. La vas a echar de menos y te va a hacer falta pero puedes apoyarte en el resto de tus amistades, sobre todo si la habéis perdido varias a la vez.
Posiblemente al principio no puedas borrarla de tus redes sociales y del Whatsapp, créeme, es lo mejor, a la larga agradecerás no haberla borrado. Al principio sus publicaciones te harán daño pero al final te servirán para rajarla sin piedad. Porque sí chicas, las ex amigas están para criticarlas de arriba abajo, aunque sea sin sentido, es una buena terapia para superar la ruptura.
Con el tiempo lo que era una herida sangrante se convertirá en una cicatriz que mirar de vez en cuando y recordar con nostalgia como apareció ahí. Te acordarás de los momentos que vivisteis y muy de vez en cuando te vendrá a la mente: “ella lo hubiera hecho así” o “hubiera dicho esto”. Aunque posiblemente acabarás pensando “ella se lo pierde” ya que seguro que si ahora es una ex amiga es porque no se ha ganado el título de amiga en tu vida. Porque a veces hacen faltan ex amigas para saber cuáles son las AMIGAS (en mayúsculas) de verdad.
