Hoy y siempre soy bastante introvertida-tímida. Sin embargo, y en contra de lo que mucha gente piensa, a muchos introvertidos no nos gusta la soledad, al contrario, disfrutamos mucho de la compañía de nuestros amigos. Pero claro, inicialmente y en lo que se suele llamar primer contacto face to face pues perdemos bastante. Por eso mismo voy a enumerar una serie de problemas-putadas que nos pasan a todos lo que no tenemos don de gentes:

Momento primer día de universidad, master, curso… PANIC ATACK.

No conoces a nadie, no hay amigos que te apoyen, la gente empieza a relacionarse como si se conocieran de toda la vida y solo han pasado 10 minutos…

giphy (3)

Cuando vemos a algún conocido en la calle no sabemos cómo saludar.

Esto es un hecho, yo no sé ni qué cara poner, ¿sonrió? ¿Pregunto qué tal? ¿Saludo solo con la mano? Con lo cual en mi caso la solución siempre es poner sonrisa tímida y agachar la cabeza.

-Los extrovertidos continuamente nos animan a que nos abramos más al mundo.

¿Hola? Es que no me sale, en serio. Es como si me dices que adelgace y paso de una talla 44 a una 36 en 10 minutos. NO SE PUEDE.

giphy

Soltarnos a hablar en un idioma que no es el materno cuesta y mucho.

Porque siempre tienes miedo de pronunciar mal una palabra y que la frase cambie de significado. Vamos que no nos gusta hacer el ridículo.

Momento amor.

Una persona tímida no se lanza a empezar cualquier tipo de relación, porque ¿Y si luego he confundido las señales y me rechaza? Nos aterroriza que nos hagan una cobra.

giphy (4)

Cuando un amigo nos presenta a algún desconocido.

¿Le doy la mano? ¿Dos besos? ¿Un abrazo? Al final acabas poniendo una mueca extraña (parecido a la típica cara de asco) y por supuesto se piensa que eres un borde.

Típica fiesta-reunión donde solo conoces a tus tres amigos y alguien tiene la genial idea de jugar al “yo nunca” o empezar a hacer preguntas que por supuesto a ti te resulta muy incómodo responder porque no te abres con desconocidos. Mientras tu amiga le está contando a un perfecto extraño hasta donde vive.

No nos gusta llamar la atención, porque eso implica miradas anónimas y siempre nos ponemos en lo peor, ¿llevare la bragueta bajada? ¿Tendré un moco en la nariz?

Si encima tenemos un trabajo cara al público, apaga y vámonos. Se nos nota en la cara que no estamos cómodos. O somos muy serios o ponemos una sonrisa más falsa que un billete de 2 euros.

Peeeero a pesar de todos estos contras nuestra familia y amigos nos quieren tal cual somos, además ¿para qué mentir? A mi ser tímida me gusta y eso es lo único que debe importar.

Sonia P