A veces el día a día no nos permite parar a darnos cuenta del regalo maravilloso que es cada nuevo amanecer. Cuando topamos con barbaries que terminan con vidas de golpe, tomamos conciencia de lo bello que es vivir. Y damos gracias por ello.
¿Por qué no nos proponemos  valorarlo cada día?
El tiempo no es excusa, solo se trata de hacer del agradecimiento un estilo de vida. Tenemos muchas cosas por lo que dar gracias.
giphy (2)
Prueba a escribir durante unas noches motivos por los que dar gracias el día que termina. Vale cualquier cosa que te haya provocado una sonrisa, placer.. Tener a mi hija conmigo, ese vino que ha resultado tan rico, el plan con amigas que ha salido para mañana, el haber comido con mi familia, ese mensaje que estaba esperando… Te darás cuenta en pocos días que cada noche tienes muchos motivos para agradecer.
Dejemos de guardar cosas para ocasiones especiales, cada día lo es si te lo propones, así que…

Descorcha ese vinito que te regalaron y disfrútalo solo o con quien te venga en gana.

  • Cómprate ese capricho que tanto deseas.
  • No esperes para ir a esa ciudad que te encanta, ve ya.
  • No te quedes esperando a que salgan planes, móntalos y los demás ya se apuntaran.
  • Escribe ya a esa persona que te trae loc@ y que lo sepa. Poco tienes a perder.
  • Abraza a tus hij@s fuerte, bésales y disfruta con ell@s cada momento.
  • Toma cada plan como una oportunidad para pasarlo bien y cada momento de relax en casa como una ocasión de disfrutar de ti y de lo que te gusta (un té, un buen libro, una peli)
  • No esperes a que alguien te acompañe a ver esa película que hace tiempo que quieres ver, ve ya mismo al cine y saboréala
  • No llores más por un amor que se fue, ámate a ti y abre la puerta a cosas mejores
  • No te estreses con el día a día, deja de correr y presta atención a tu alrededor. Al final tanto correr no nos aporta nada. ¿Necesitas llegar a todo para ser feliz?
DEJA DE ESPERAR, VIVE, Y AGRADECE
Como he leído hoy mismo: «Celebremos cada ocasión con vino y palabras dulces.» (Plauto). Pues eso, a celebrar, con lo que sea. Así que concéntrate y hazte el favor de saborear cada pequeña alegría del día a día, te lo debes. Viniste a ser feliz.
​​

Verónica Oliva