Ha vuelto a pasar. Y sabías que este momento llegaría… Quedas con la enésima amiga de la infancia / instituto / universidad y te suelta la bomba: «ME CASO!»

giphy3333

Y tú, que estás ahí que no catas varón desde hace una temporada, te alegras por tu amiga mientras que mentalmente haces la cuenta de los invitados y te das cuenta de que eres la única soltera. Así que te preparas para escuchar de más de uno la frase «De una boda sale otra boda», cuando sabes perfectamente que eso no es cierto, y te pones manos a la obra para escoger modelito, peinado y un lugar estratégico junto a la barra libre.

Y por supuesto te preparas para sobrevivir soltera al evento más romántico del mundo. Y es que cuando ya lo has vivido alguna vez, tienes tus truquitos:

1. Asume que no eres la única soltera. Puede que ser la única de la gente que conoces, pero las posibilidad de que absolutamente todas las mesas estén formadas por parejas y a tí te hayan encajado tu silla en un huequito son mínimas

2. Disfruta de la compañía de otras parejas. Si sólo te rodeas de parejas empalagosas tu última preocupación debería ser lo de ir soltera a una boda… Cambia de amigos. Es posible estar rodeada de otras parejas cuando estás soltera sin tener la imperiosa necesidad de cortarte las venas a cada minuto

no4bc_audience_musical-theatre

3. Conoce gente. Quizá de esa boda no salga otra boda, pero puede que descubras que esa amiga de la infancia de tu compañera de trabajo tiene las mismas aficiones que tú, o que esa pareja tan maja que te ha tocado al lado en la mesa vive en tu mismo barrio

4. Busca una pareja ficticia. No se trata de que te metas en una peli americana y contrates a un gigolo para que te acompañe, pero si no quieres ir sola de ninguna manera igual a algún amigo le apetece ir contigo ese día. Y si no, quizá alguno de tus amigos con pareja tenga que ir solo ese día, así que podéis ser pareja por un día y haceros el favor el uno al otro. El favor de acompañaros, que os estoy viendo…

96S6NnP

5. Pégate a la barra libre. Chica, que está to pagao! Disfruta del vinito y los gin tonics y esa recena que sabes que van a sacar en un ratillo y que te va a dar la vida. ¿De verdad después de un par de copitas sigues sufriendo por haber ido sola?

6. Baila como si no hubiera un mañana. Si ya has asumido que en esa boda no vas a pillar, al menos dalo todo en la pista de baile aunque hagas el ridículo. Total, aquí no te conoce nadie…

anigif_enhanced-buzz-19987-1347141408-2

7. Disfruta de no tener que depender de nadie para volver a casa. Que si tu chico madruga mañana, que si se ha tajado más de lo previsto, que si mañana hay fútbol… Si vas sola tienes la ventaja de que volverás sola. O no. Pero aún así decidirás tú cuándo volver…

8. Acepta que ese día no es para ti, es para los novios. Así que, aunque ninguno de los puntos anteriores te acabe de convencer, asume que ellos son los protagonistas del día y que tu aburrimiento, cabreo o pereza por estar soltera no deberían eclipsar su felicidad

monona-terrace-wedding-stop-motion-madison-wi