Tinder a veces esconde caramelitos, como Fabrizio, un italiano que me hizo Match hace unos meses. Tenía su perfil en un español italianizado y hablaba con bastantes faltas, así que supuse que igual mejor en Inglés. Pero Inglés niente de niente. Yo te entiendo Fabrizio, en España también hemos aprendido inglés de forma muy divertida. Con la última hoja de verbos irregulares, diciendo “cut, cut, cut” “put, put, put”. A LO LOCO. Y ahora llegan las lamentaciones. Pero centrémonos en el italiano.
Lo mejor de Fabrizio es que era una puta copia del Nek de hace 15 años y lo mostraba con fotos en bañador. Lo peor, es que era demasiado empalagoso, diciendo piropos todo el día. Y a todas nos gusta un cariño, pero tampoco pasarse. Además hay gente que escribe sonetos, pero luego una chupadita bien no te la hace.
Quedamos a los pocos días en un bar cerca de mi casa, y la sorpresa fue cuando lo vi con ropa, porque venía entero de negro: pantalón, deportivas, jersey y una especie de capa negra con capucha. Coño, en Tinder todo fotos en bañador y ahora aparecía como un dementor. ¿Qué le digo, expectro patronum? Además no bebía. Encima sobrio. Esto no podía salir bien de ninguna manera.
Después de un par de cervezas (mías) salimos de allí y me dijo que tenía que irse pero me acompañaba a casa porque él era un caballero. Ay Fabrizio, un caballero es el que te toca y te folla hasta asegurarse que quedas satisfecha. El de las cenas y las flores es un salido con paciencia. Además a mí me gustan los hombres educados que saben cuándo no serlo.
Una vez en la puerta como veía que él no avanzaba, le empecé a cantar la canción de Raffaella.
– Conoces esta canción de Raffaella Carrá? Ahhhhh… en el amor todo es empezar.
– Sí! Ahhhhh… a far l’amore comincia tu.
– Sí, ¿empezamos? ????
– En Italia decimos “Si la vitalita e grande e tutto va bene… Avanti con il pene; Ma, si la situazzione e dificile e la forza mengua… Avanti con la lengua; Si questa posizione si torna imposibile e tutto intento e inhumano… Avanti con la mano. Ma, si niente funziona… e tutto e nulo… Avanti con il culo. Ma, Avanti… sempre avanti”
– ……………..
¿Y ahora quién es la guapa que interpreta eso? Yo no sé qué quería decir, pero me lancé a la boca de aquella mezcla entre Arturo Fernández y Nek.
Me lo llevo a la habitación, enciendo la luz y empiezo a sacarle la ropa. Y va él y apaga la luz. ¿Por qué hacen eso?
– Fabrizio, ¿te importa que encienda la luz? Es que las bragas me han costado un riñón.
– Jiji, vale.
Nos ponemos en situación horizontal y él se pone encima mía, besándome. Cuando noto que empieza a caerme agua en la cara. No. Agua no. Lágrimas!
– Fabrizio… ¿estás llorando?
– Scusa
– ¿Pero qué pasa? ¿Estás bien?
– Echo de menos a mi exnovia
Bueno carallo bueno. No me joder. Yo en otra vida debí ser miembro de la Inquisición o algo, porque estos follodramas no son normales. Así que nada, a escuchar la historia del romance. Que si 5 años, que si mucho amor, pero discutían, que claro así no se podía vivir, pero cree que es la mujer de su vida.
Y yo mirándolo fijamente, con la mirada perdida, pensando qué habría sido de Paqui la Coles. Lo que me hacía reir esa mujer.
– Bueno Fabrizio, tú tranquilo, ya lo superarás.
– Lo siento mucho. Si quieres puedes giocare con il mio pene.
– ¿Cómo?…. Mira Fabricio. No sé lo que decís en Italia, pero yo digo otra cosa «para tan poca salchicha, no aguanto al cerdo entero».
– ¿Qué cosa?
– Arrivederci
