¡Necesito ayuda! Estoy saliendo con alguien. Todo genial, pero en cuanto al sexo… la cosa no funciona. Él se pone a mil, pero justo cuando se pone el condón, o se corre al segundo o la erección desaparece, y es imposible hacerlo. Él empieza a sentirse mal y claro, aunque me quedo con las ganas, intento decirle que no pasa nada. Pero la verdad no sé si es él, o yo, o qué pasa…
(Daniela)
Hola Daniela. La culpa de la pérdida de la erección o de la eyaculación precoz antes de la penetración no la tenéis ninguno de los dos, ¡la tiene su Sistema Nervioso Autónomo! Vamos, que estas cosas no tienen ni dejan de tener culpa porque suelen pasar de tal forma que nos es muy difícil controlarlas (que no imposible).
El Sistema Nervioso Autónomo se divide en dos: el Sistema Nervioso Simpático y el Sistema Nervioso Parasimpático, ¿te suena?
Ambos cumplen diversas funciones por todo el cuerpo, siendo tanto la erección como la eyaculación, reflejos del plexo sacro.
Es importante y muy útil en estos casos, conocer cómo funciona nuestro cuerpo para aprender a dominarlo. Es por ello que la ocasión merece hacer una breve explicación biológica, fisiológica y psicológica del cuerpo humano (sí, toda esta movida se pone en marcha cuando decidimos mantener relaciones sexuales, ¿y parecía que no, eh?).
Nuestro cuerpo funciona de tal manera que, estando tranquilos y relajados, el organismo obedece las funciones del Sistema Nervioso Parasimpático encargado de la erección, por lo que es esencial estar muy relajado para tener y mantener la erección.
Por el contrario, ante una situación de estrés, se activa el Sistema NerviosoSimpático, cuya función es poner en estado de alerta a nuestro cuerpo, dejándolo en cuestión de milisegundos listo para reaccionar de forma inmediata ante la situación de peligro. Esto conlleva la retirada de sangre de las zonas genitales si la hubiera (desapareciendo así la erección en los hombres), puesto que el cuerpo necesita bombear el torrente sanguíneo hacia otras partes del cuerpo. Normal, nuestro cerebro no es tonto y cree que necesitamos toda nuestra energía para responder a una amenaza, por lo que la orden a priori está bien ejecutada. Y digo a priori porque claro, lo que no sabe nuestro cerebro es que el estrés o nervio que percibe no es por una amenaza, es por la situación en sí. AY LOS NERVIOS, QUE TRAICIONEROS.
¿Y qué tiene que ver todo esto con la eyaculación? Bien, cuando se ejecuta la estimulación sexual, se va activando poco a poco el Sistema Nervioso Simpático y desactivando el Parasimpático, hasta que BOOM: aparece el orgasmo. Es decir, durante el orgasmo nuestro cuerpo reacciona tal y como reaccionaría ante una situación de estrés. Esta sería la explicación a los problemas de eyaculación precoz, el hombre en cuestión ha estado relajado, por lo que su excitación y su erección se han mantenido, pero de repente su Sistema Nervioso Simpático se ha activado y ha dado paso a una eyaculación antes de la penetración o a escasos segundos de ella.
Por lo tanto, para tener una relación sexual satisfactoria (y aunque parezca un tópico este consejo) es MUY importante estar relajados para poder excitarnos y dejarnos llevar para poder alcanzar el orgasmo y que nuestro Sistema Nervioso haga su trabajo de acuerdo a nuestra apetencia.
Te recomiendo, Daniela, que habléis sobre este tema ambos con total confianza, que intentéis por el momento mantener vuestras relaciones sexuales sin practicar el coito (masturbación, sexo oral, juegos de rol, sexo tántrico, masajes… ¡investigad!) y que, mientras tanto, él vaya ensayando la puesta del condón mientras se masturba. Es decir, el ejercicio consiste en que tu chico se masturbe y cuando esté lo suficientemente excitado se ponga el condón y siga masturbándose hasta alcanzar el orgasmo. Luego, esto mismo podéis hacerlo juntos aunque sin coito al principio. La penetración la podéis llevar a cabo cuando el problema se haya resuelto y él pueda colocarse el preservativo estando tú delante, sin eyacular o perder la erección.
