Una de las grandes controversias que se plantea muchas veces alrededor de la masturbación es, si está bien o no hacerlo una vez que se tiene pareja. Ya  que cuando nos enteramos de que nuestra  pareja se masturba… muchos y muchas ya se tiran de los pelos o se dan de cabezazos contra las paredes porque ¡No puede ser!

No es de extrañar que muchas personas, tanto hombres como mujeres piensen que una vez que tienes una relación, la masturbación desaparece para siempre, total, ya no es necesaria ¡Ja! y mil veces ¡Ja!

Vayamos por partes lo primero de todo, ¿en qué consiste la masturbación? Principalmente es un momento de auto-placer (auto, osea sé tú solito o solita) en un momento de excitación (calentón del bueno) en el que no se encuentra tu pareja cerca, no podemos dormir (muy recurrente), nos apetece un orgasmo para relajarnos o simplemente porque si, es la mejor forma de corrernos de una forma rápida y sencilla o simplemente porque nos da la real gana.

Vale hasta ahí todo bien, el problema aparece cuando le atribuimos a la masturbación de mi pareja cosas que no son, es decir, los pensamientos más frecuentes cuando una persona no ve bien que el otro se masturbe son:

  • Está insatisfecho/a conmigo
  • Ya no le atraigo lo suficiente
  • Soy un desastre en la cama y por eso prefiere darse placer a solas
  • No se siente cómodo conmigo

Esto en muchas ocasiones, y no me canso de verlo en consulta, tiene más que ver con las inseguridades y la falta de autoestima de la parte que no le parece bien, que de otra cosa. Por lo general, los más dados a pensar  todo esto son los hombres, los pobres de mi corazón se vuelven totalmente responsables de TÚ placer, ellos y solo ellos.

Pues con estas palabras quiero quitaros esa presión que se os ha inculcado, porque todos hemos oído eso de “No hay una mujer frígida, sino hombres inexpertos”, y  no perdona, aquí cada uno es responsable de su propio placer, de investigar su cuerpo, de conocerse, de saber que le gusta y que no y así poder explicárselo a tu pareja.

 

¡Fácil y sencillo oye!, la masturbación solo tiene consecuencias positivas, ya que también ayuda a mantener el deseo sexual vivo (eso que hay veces que parece que nos abandona para no volver…) pues si lo mantenemos ocupado, le costará más dejarnos.

Como sexóloga, recomiendo totalmente la masturbación ya se tenga o no una relación, no solo por lo maravilloso y beneficioso que resulta, sino que además es la mejor forma de AUTOCONOCIMIENTO, es decir, si yo sé cómo funciona mi cuerpo a la perfección, me será mucho más fácil enseñárselo al otro y por eso, no hay que dejar de investigarse ¡Nunca!

Si es cierto, que la cantidad de veces que te masturbas puede disminuir cuando te ves en una relación, ya que tienes placer y orgasmos por otro lado (por lo general), o simplemente no te apetece de la misma forma porque amigos míos saber que se tiene sexo asegurado nos vuelve muy cómodos, y nuestro cuerpo se “mal acostumbra”. En cambio cuando estamos solteros podemos decir, que no sabemos cuándo será nuestro próximo encuentro sexual y estamos un poquitín más alterados.

Por eso, si descubres que tu pareja se masturba, ¡No montes un drama! Ya que no tiene nada que ver contigo, sino con su propio placer y créeme cuando te digo que tu deberías hacer exactamente lo mismo. La masturbación mejorará vuestra vida sexual ¡No la perjudica!

 

La sexualidad nace con uno y nunca deja de desarrollarse por eso siempre habrá que trabajarla solo y en pareja, por tanto ¡A practicar!