Me llamo Sandra, chica curada cual jamoncito de bellota durante 31 años en este mundo. Preciosa por dentro y por fuera. Salí en el programa de First Dates hace un par de días sin cita pero ganándome el cariño y amor de muchas de las personas que me veían. A pesar de que no tuve cita, yo creo que solventé la situación con alegría y buen humor y eso fue lo que hizo que la gente se sintiera identificada conmigo.

Recibí muchos comentarios increíbles, la acogida fue muy cálida por parte de la gente que me vio desde sus casas, dándome apoyo, describiendo lo que sintieron al verme, deseándome cosas muy buenas, queriendo volver a verme con una cita, y esa admiración expresada en mensajes privados por parte de chicas y chicos que tienen problemas de inseguridad y autoestima a raíz de su físico. Bueno no, rectifico, a raíz de una presión social que establece los cánones de belleza por unas normas de dudosa objetividad. Y de ahí saco una pequeña flechita que representa (afortunadamente muy pequeñita), dentro de mi acogida en redes sociales, a los haters, gordofóbicos o cómo queráis llamarlos; yo prefiero llamarlos NECIOS.

La cara que se me quedó cuando no apareció mi cita
La cara que se me quedó cuando no apareció mi cita

Son personas que se sienten inferiores, quizá por el hecho de que una persona no aceptada por esos cánones absurdos de belleza que establece la sociedad de moda sea capaz de tener AMOR PROPIO, AUTOESTIMA, DESPARPAJO, SIMPATÍA, FELICIDAD, BUENAS VIBRACIONES, EMPATÍA, GANAS DE VIVIR Y SER JODIDAMENTE FELIZ. Porque sí, somos capaces de ser bellos y ser felices independientemente de nuestro físico. Un consejo: Si no eres capaz de respetar la felicidad y el amor propio de la gente que te rodea sin importarte un comino cómo sea físicamente, tienes sencillamente un serio problema.

A mí siempre me ha hecho gracia el tema de las críticas. Si eres positiva y tienes amor propio, eres una creída; si no te quieres eres una negativa pesimista sin amor propio. ¡Y una no sabe ya cómo acertar! Para mí es totalmente lícito que la gente pueda opinar con respeto sobre un tema, todos tenemos ese derecho, pero con respeto por favor. Más concretamente me cuesta entender el tema de la necesidad que tiene la gente de ser ACEPTADO SOCIALMENTE, o cómo han sido educados para ser así. No está mal necesitar un poco de eso, a todos nos gusta que nos doren la píldora. Yo misma, sin ir más lejos, cuando grabé el capítulo de First Dates estaba cagada por cómo iban a acogerme en las RRSS, por los palos que me iban a dar en el lomo con insultos gratuitos y ganas de hacer daño, pero no es precisamente mi motor de vida afortunadamente porque así lo he decidido yo. Ese miedo no me bloquea a hacer lo que me apetece y por eso me lancé importándome tres pitos si me decían gorda y otra sarta de sandeces que he leído por ahí. Tener miedo es natural, pero procura que ese miedo no te bloquee a hacer lo que quieres. 

Matías we love u
Matías we love u

Lo que está claro es que si tuviéramos que contentar a todos y cada uno de los que habitamos en la tierra (unos 7 miles de millones de personitas, cada uno de su madre y de su padre, de su cultura y sus circunstancias), nos volveríamos locos. Así que lo que nos queda es contentarnos a nosotros mismos, a disfrutar de nuestra existencia y de disfrutar de todas y cada una de las personas que quieren estar en nuestras vidas disfrutando de nuestra esencia como personas, y cuya esencia sólo construyes tú con tus ganas y tu esfuerzo. Tiene mayor sentido ser feliz porque sí que reprimirse porque sí. ¡Piénsalo! Jamás odies a tus otros “yo” del pasado simplemente porque físicamente no encajas en esta sociedad necia. He visto a gente romper fotografías con muchísima rabia e insultarse gratuitamente por el físico que tenían. Recuerda que tú eres UNO, que esa persona está en constante evolución cual árbol que crece y se ramifica, y que tú ahora eres lo que eres gracias a esa persona del pasado, de bebé, de niña, de adolescente gordita, con granos en la cara, y gafas de culo de vaso. Nadie nos maneja cual títere, nos manejamos nosotros mismos. Y le tienes que dar GRACIAS a pulmón abierto porque ella tuvo el valor de querer cambiar y evolucionar a ser la mejor versión de sí misma para ser lo que eres ahora. Dale las gracias SIEMPRE. Date las gracias ahora mismo en el presente por lo que serás el día de mañana, SIEMPRE.

Recuerda que el físico es puro Marketing. Que el marketing sirve para captar miradas y clientes en un segundo pero que igual el producto no es tan sumamente bueno como nos venden: efímero y volátil en el tiempo. Eso mismo pasa con el aspecto físico. Nos educan pensando que el físico es una prioridad en la escala de importancias para las relaciones, bajo esa pregunta absurda de “¿qué es lo primero que ves? el físico, ¿no?” como si fuese una pregunta retórica que se responde a sí sola por obviedad. Pues me vais a disculpar, pero de obviedad tiene bastante poco, bajo mi punto de vista, si no que le pregunten a un ciego, los cuales usan el resto de sus sentidos para conocer a las personas y se enamoran igual que nosotros ¡O MEJOR!… y qué bonito por cierto sin prejuicios. Portamos de cinco sentidos ¡CINCO! y sólo nos rebajamos a usar uno. Cuando te enamores, hazlo con todos  y cada uno de ellos; vas a sentir cosas que jamás pensaste que sentirías.

Bajo este paradigma vital, la gente se preocupa en exceso en tener una apariencia física aceptada por la sociedad, en matarse en el gimnasio y en comer “saludable” (pero el fin de semana es digno de analizar bajo las normas de lo saludable). Pero, oye, están perfectos para sus hembras y ellas para sus machos. Porque queridas, lo más importante es tener un físico 10 socialmente aceptado (sarcasmo Mode ON). Yo aquí, desde que era un moquito, siempre había visto que el método de selección era muy jerarquizado y básico:
Primero: que esté to buena/o. Segundo: y ya si es simpática/o y agradable eso que me llevo pero no pasa nada porque lo más importante es que está muy buenorra/o y puedo pavonearme y pasear para que todos me vean y sientan envidia, aunque como persona sea insoportable, pero está to buena/o si hace falta. Mi pene/vagina es lo primero, of course.” (Sarcasmo Mode ON)

¿Qué genera esto? Pues lo que estáis viendo a diario: parejas infelices cuyo único motor de vida es el sexo y el aparentar. Que se reprimen y anulan los unos a los otros diciéndoles que tienen que cambiar si quieren estar en pareja con ella o él. ¿Tienes que cambiar para estar conmigo? ¿Really? ¿Acaso el amor no es aceptar al otro con sus virtudes y sus defectos? ¿Qué mierda es ésta? Estamos educados horrorosamente siento decir. Priorizamos en cosas absurdas dejando de lado otras tan importantes como el SER BUENO por encima del ESTAR BUENO. Hay mucha gente que no sabe estar sola, que aceptan estar con el primero que pase a cualquier precio, y eso es darle una tremenda patada en el culo a tu amor propio.

Está de puta madre cuidarse. Para mí es un deber obligatorio hacerlo, pero tan importante es cuidarse física como mentalmente. Yo precisamente empecé por cuidar mi mente desde hace años y reconozco que no fue fácil; empecé a cuidarme mentalmente porque vi que empezando por el físico siempre terminaba en fracaso. Te pegas durante años adoptando una costumbre autodestructible en la que siempre eres lo peor porque no eres como los demás quieren. Me costó mucho pero cambié y estoy súper orgullosa de mí misma, y eso jamás va a hacer daño a nadie y menos a mí que es lo que más me importa. Tu opinión sobre ti mismo es la más importante. Precisamente el haberme empezado a cuidar mentalmente es lo que está haciendo que cambie todo lo demás; voy al gimnasio a diario dos horitas, como sano, me dedico siempre las mejores palabras a mí misma, lucho por las cosas que amo con pasión y mucho amor, y hago a los demás lo que adoro que me hagan a mí. Esto al final se describe como una espiral que gira hacia afuera, en vez de girar hacia dentro que termina ahogándote (y que es lo que pasa cuando no tenemos ni amor propio ni autoestima). 

Sandra-gordita-jodidamente-preciosa-dentro_MDSVID20160830_0179_10

Es una espiral que se expande con toda esa energía, magnetismo y amor que generas dentro de ti e impregna a tooooodos y cada uno de los que están a tu al rededor. Haciendo que sus espirales giren hacia fuera y te impregnen ellos a ti. Es quizá de los círculos viciosos más bonitos que podemos experimentar como personas humanas. Cuando te cuidas eres feliz, y compartir tu felicidad atrae sin duda alguna, y la felicidad de los demás es parte de tu felicidad también. La felicidad se refleja en tu aspecto físico de una manera brutal, y brillas y desprendes magnetismo, y eso te hace bella indudablemente. Pero sobre todo HAZLO POR TI, SIEMPRE. 

A fin de cuentas todos tenemos un público que nos admira y les encanta observarnos y estar en nuestras vidas; eso es precioso. Me encantaría citar una frase de la que fue mi psicóloga Cecilia Ruano y un gran motor de cambio para mí:

“Para amar, no es necesario “amar demasiado”, simplemente “amar bien”. Y para “amar bien” primero está el “amor propio” y eso jamás será egoísta”. 

Somos esclavos de lo que vemos, de la belleza que se ve y se toca. La que va de fuera a dentro. Pero la belleza de verdad, la que sobrevive a los años y la que realmente acaba cambiando las cosas es justamente la que recorre el camino contrario, de dentro hacia fuera. Lástima que esa sea siempre tan escasa… 

Con mucho amor, que no es poco, espero que con estas palabras os ayude a quereros un poquito más y mejor. 

¡Sean felices!

Sandra Sánchez.