Realmente esto os pasará a muchas. Tu primer novio de los 17 años es un capullo, un capullo con el que duras 3 años a pesar de que nada funciona bien. Tú decides dar el primer paso para terminar la relación, a pesar de quererlo como nunca y ahí empieza todo.

Cuando dejas a una personas queriéndola y sin querer dejarla, tu vida puede ser un completo caos, y más si tienes 20 años y la autoestima baja. Descubres que ha escrito pestes en un fotolog sobre ti(quién utiliza fotolog aún?), cuando aún estabais juntos, que te ha sido infiel, aunque eso ya lo sospechabas y te enteras del asunto de su propia boca dos años más tarde cuando quedas con él, porque sigues quedando con él y destrozándote el corazón. Pasa el tiempo y gracias a la experiencia empiezas a descubrir que es un capullo, que solo te busca cuando le pica el miembro sexual masculino. Tú intentas pasar página, incluso cambiar de libro, conoces a chicos majisimos, y se jode todo, porque él, él muy egoísta no puede dejarte marchar, pero tampoco estar contigo. Pero resumiré, que esto no va sobre él: después de 4 años de que jueguen a dos bandas conmigo, de escuchar que he sido una maltratadora psicológica (término bastante fuerte para usar a la ligera) y que estoy gorda de más (aunque le ponía a 100 mil veces más que antes), de descubrir otra página(menos mal que dejó lo del fotolog) donde hablaba mal de mí y genial de la chica con la que había sido infiel, mi cabeza y mi corazón dijeron basta. Cada uno se toma el tiempo que necesita para olvidar, yo he olvidado y también cerré mi corazón en banda, más bien lo congelé, porque al final de todo, no te queda un corazón roto, te queda un corazón helado.

Y sí amigas, seguro que a vosotras también os ha pasado esto: te reconstruyes, vuelves a ser, no la misma, una versión mejorada de tí, decides seguir tus sueños, en mi caso ser fotógrafa, el universo empieza a mandarte oportunidades buenísimas que no puedes dejar escapar, te dices a tí misma que el 2017 va a ser un año grande y que los 24 los vas a recordar siempre, te olvidas de los chicos, de los amores, y del sexo(quizás lo que más me ha costado). Y todo va genial hasta que lo dices en voz alta: no quiero distracciones. Ahí el universo ha puesto la oreja y como es tan payaso, decide jugártela.

Vas a la boda de unos chicos muy majos a hacerles las fotos, porque saben que estoy empezando y han confiado en mí para inmortalizar el día más importante de su relación. Así que toda tranquila vas con tu cámara, tu mochila, tus labios bien pintados de rojo (porque ahora si que tienes autoestima para dar y regalar, aunque sigas viéndote los defectillos)y haces fotos, y hablas con el primo majo del novio sobre fotografía…y ahí es cuando tu cabeza te dice: ¡Te va a gustar, así que frena!Y Te pasas la noche echando fotos, teniendo miniconversaciones con el primo (porque al final cuando alguien te atrae no lo puedes evitar) y acaba la noche y te vas a tu casa. Te acuestas pensando en que después de 4 años te ha atraído un chico y estás contenta porque en el fondo no querías que pasara nada para no estropear tus planes (entre los que está mudarte de ciudad).

Al día siguiente sigues tu rutina, terminas todos los proyectos que tienes entre manos y cuando has decidido tumbarte un rato para descansar ves el temido y esperado, en parte, mensaje: Hola, soy el primo majo.

¡ALERTA!

Ya ha pasado, el universo lo ha mandado y a ti aunque te encanta y no paras de reírte como una descosida, te da un miedo que te cagas. ¿Por qué? Porque sabes que te gusta, que congeniáis y que tu no eres de las que se desenamora fácil, en realidad una media de 4 años.

Hablas con él y os dais cuenta de que estuvisteis pensando toda la noche la manera de entablar conversación, buscándoos la mirada o el momento de encontraros a solas. Vamos, un hecho de película, algo que no te ha pasado jamás, porque encima te dice que cuando vio tu mirada la primera vez se quedo prendado, no tu cara, ni tus ojos, ni tu sonrisa, tu mirada y le encanta. Y a mi me encanta aún más.

Y este es mi problema: el primo me gusta,es atento, romántico, inteligente, detallista, gracioso…pero me da miedo, PÁNICO, dejarme llevar. Y ya no es que te hagan daño, que también, es el olvido lo que me da muchísimo miedo. Que todo vaya bien hasta que empiece a ir mal y me toque olvidar. Soy tauro, me vuelco en las relaciones como nadie, y cuando quiero, quiero de verdad, y sé que al primo puedo llegar a quererlo, pero no quiero pasar otra vez por el olvido. Si, puede sonar a histérica, obsesiva por pensar en eso y porque se trata de dar tiempo, tener paciencia y confiar, pero en esos 4 años me perdí, me ha costado mucho ser la persona que soy ahora. Me estoy dejando llevar, en la medida que puedo, pero él está tan emocionado, y es tan adorable que no me gusta poder estar al 100%. No sé como hacerlo, porque además, he decidido que no hablemos del pasado, no quiero estar estancada en él, y explicarle todo eso sin hablar del pasado es difícil. Tengo muy claro que por miedo no voy a dejar de verle, pero me gustaría poder disfrutar, solo eso.

Al final es la típica historia de: me da miedo entrar en otra relación después de tener el corazón roto…pero quizás alguna ha pasado por lo mismo y puede ayudarme, aunque sea un poquito…

¡Muchas gracias!