Esta es una de esas recetas que salen ricas a pesar de que están hechas con restos de la nevera. Sabía que me apetecía una quiche, que tenía que ser proteica y que no me apetecía bajar al super. Opcion: abre la nevera y pilla lo que creas que puede combinar más o menos bien. En mi caso fue:

– 2 huevos pequeños

– 3 claras de huevo

– Leche evaporada

– Bacon de pavo

– Champiñones Portobello

– Queso rayado bajo en grasa

– Sal

quiche de dieta

 

En este caso mezclé los ingredientes en crudo ya que con el ratito de horno tanto las setas como el bacon de pavo se cocinan perfectamente. Si vas a añadir cosas como puerros, cebolla o pimientos, lo mejor es que pases la mezcla de verduras por la sartén antes unirla al huevo y meterlo al horno.

Lo dicho. Batimos los huevos en un bol amplio y cuando están listos añadimos el resto de ingredientes bien troceados. Vertimos todo sobre un molde. Yo lo hice en uno de silicona cuyo resultado son 6 quiches pequeñas (que está genial porque así luego sirven de aperitivo proteico al durar un par de días en la nevera).

quiche light

Es hora de meterlo en el horno. Yo lo tuve unos 20 minutos a unos 180 grados, pero os recomendaría que vayáis revisando sobre la marcha para que quede en el punto justo que a vosotros os gusta.

quiche proteica

Una vez listas desmoldamos. Como véis, por fuera quedan doraditas pero por dentro están hiper jugosas.

quiche esparragos

Acompañadas de unos buenos espárragos trigueros a la plancha con sal gorda… ¡la cena perfecta! Me han gustado tanto estas mini quiches que ya planeo hacerlas con mil verduras diferentes. También están muy ricas con atún, aceitunas o salmón, por ejemplo. En vez de leche evaporada puedes usar queso batido 0% y si te curras una masa de avena, ya entonces matrícula de honor.