Hace un año que me mudé a mi piso. Estaba acostumbrada al anterior, en el que usaba mi tocador para maquillarme y tenía todos mis potingues bien ordenados en mi maletín y mis cosas. Al mudarme, cambió la organización de todo y tenía el tocador inutilizado al no encontrar el espacio correcto para dejar mi maletín, así que empecé a maquillarme en el baño (como la mayoría de la humanidad). Pasé del todo al nada, y me acostumbré. Me hacía el eyeliner sin ver un pijo, y sentada en la taza del baño. Todo iba ‘bien’ hasta que me regalaron todos los potis de la colección de KatVonD para Sephora. Me hice un maquillaje bien cargadito y me vi contorsionándome para aplicarme todo. Me harté y me fui al tocador. Maravilla.
Fue ahí cuando decidí que tenía que volver a usarlo, que soy afortunada de tener un espacio así para mí, que echaba de menos mi rutina con mis luces de estrella de Hollywood. Así que trasladé el maquillaje, pero me quedaba todo desordenado. Ya había tenido organizadores de todas las formas y colores, pero necesitaba algo que quedase mono en el tocador. Me recorrí los chinos del barrio en busca de un organizador maquillaje de metacrilato, pero quedé sorprendida de los precios careros. Cuando yo los compraba recuerdo que no subían de los 10 euros, así que para Ebay/Ali Express que me fui.
– Organizador labiales. Mi opción prefe es la de metacrilato. Esta de 24 está por 1,54€ (más 1,99€ de envío) en Ebay. Os aconsejo que si queréis el mejor precio, comparéis a saco. Porque está misma opción en Ali por 4,37€ (una miseria, lo sé, pero la pela es la pela).
– Organizador maquillaje general. En este caso, después de recorrerme tiendas y el internet entero, la mejor oferta la encontré en Leroy Merlin. Organizador de 3 cajones con parte superior para poner labiales y demás. Si os gusta la idea y necesitáis más cajones, podéis comprar los de 3 o de 2 y ponerlos debajo de este.
Esta era mi idea principal, pero como tengo TANTO maquillaje no hacía nada con esto. Así que opté por hacerme un DIY bien moni. Necesitarás: 3 cajones, del mismo tamaño, de metacrilato de los chinos; y dos más pequeños. Y encajarlos, ya está XD Los míos los encontré en mi chino de confianza, al precio de 0,75 cada cajón grande y 0,30 los pequeños. Si quieres puedes forrarlos con un papel bonito, washi tape o tela :)
– Para el algodón. Llevo muchos años con el mismo de Ikea. En él guardo tiritas y algodoncito, y me aseguro de que no le entre ni una pizca de cacola del baño. No me gusta tenerlo al aire porque me imagino al algodón absorviendo todo lo que hay por el ambiente y muero del asco (especialita que es una).
– Laca de uñas. Yo las tengo organizadas en una caja de perfume, pero si eres de las que tienes tropecientos, toma nota de esta opción. Usa un organizador de zapatos de pared como minibolsitas para meter los esmaltes por colorines, así los verás mejor y darán color a la habitación.
– Para los clips de pelo. ¿Cuántos clips habrás perdido a lo largo de tu vida? Está la coña de que deben estar todos en un mundo paralelo, riéndose de nosotras cuando los buscamos. No sé cuántos habré comprado, no se cuántos habré perdido, pero desde que descubrí este DIY los pierdo menos. Solo necesitas una cajita de caramelos Tic Tac. Así de simple.
– Para las pestañas postizas/ Pastillero. Esto es una mamarrachada, pero es tan cuqui que no he podido evitarlo.
– Pinceles. Si tienes muchos pinceles lo mejor es pillarte una de las macetas cuquis que hay en Ikea. Si tienes poquitos o quieres seguir con el acrílico, esta opción es una pocholada.
– Para los pinceles más cortos, las pinzas y los gloss que no entran en el organizador de labiales, os propongo esta mariquita que en principio sirve para los cepillos de dientes y la pasta, pero que os puede ser de gran utilidad para engancharlo en el espejo y organizar el resto de potis.
¡Espero haberos ayudado e ir ampliando!
