Aquí estás tú, sin hacer nada especial, sintiendo cómo la melancolía y la nostalgia te envuelven igual que si fueras un sándwich para llevar. Es en este momento cuando te preguntas cosas que en ocasiones normales no te plantearías. Cuestionándote cada cosa que hiciste, pensando hipótesis sobre algo que ni fue ni será. Parece un simple pasatiempo, podrías estar leyendo o viendo la tele pero no, hoy tienes unos de esos días en los que sientes un vacío que sólo parece llenarse de melancolía y nostalgia, de sentimientos invisibles y puñeteros que consiguen que todo lo que te rodea carezca de importancia, porque sencilla y llanamente ECHAS de MENOS.

Resultado de imagen de blu is the waarmest color sad

Es nostalgia porque lo que fue, ya no es. Es el recuerdo de un sentimiento que si aún es fuerte, te quema. Si, por el contrario, se ha atenuado con el tiempo, te planteas que tal vez pasaste página demasiado pronto y dudas, o tal vez sabes que tomaste la decisión correcta pero duele… lo mires por donde lo mires estás jodido.

Es curioso esto de echar de menos porque nunca sabes si vas demasiado lento o demasiado deprisa. Sin embargo, lo que sí sabes es que por mucho que corras, por mucho que quieras cubrir la tristeza con una manta bien gruesa, la misma con la que te cubres cuando tienes frío, ella sigue ahí; es una carga pequeña, soportable, apenas interfiere en tu vida pero duele, porque echas de menos. Pero el tiempo pasa y has de pasar página de verdad, porque no hay que ser pasado sino presente, no te vaya a pillar el toro del futuro y te des cuenta de que lo único que has hecho es poner una y otra vez canciones tristes que te hunden cada vez más.

Resultado de imagen de amy farrah fowler singing sometimes

Precisamente porque no quieres pasarte la vida en un bucle de melancolía y helado de chocolate, caminas hacia delante, dando la espalda a lo que ya no es. Llega el día en el que todo pasa, porque tampoco fue para tanto o tal vez sí, pero no queda otra ¿verdad? Al final sabes que la tristeza deja paso a una nostalgia ocasional típica de los días grises y lluviosos, como los de hoy, que te invade cuando ves de nuevo el libro que te regaló y que quisiste guardar  por “los buenos tiempos” o ese anillo que creíste esconder a buen recaudo,, tú me entiendes.

Resultado de imagen de rachel green sad

Es en estos días grises cuando eres consciente de que estás rodeado de objetos que no son más que recuerdos acumulados con el paso del tiempo, esos que ya tienes tan asumidos que ni notas su presencia. Y, es en estos días tristes cuando tu mente rememora todos aquellos momentos que, en realidad, nunca has llegado a olvidar.. Aún no sabes por qué, pero los mantienes en tu memoria, tal vez porque a veces, solo a veces, cuando estás a solas, es bonito recordar y echar de menos a ese alguien del que apenas te acuerdas ya.

Tales días como hoy, es mejor asumir que la tristeza es a veces la mejor compañía, que hay que dejarse llevar y que no pasa nada si donde hay objetos nosotros vemos recuerdos, al igual que no ocurre nada si, por una vez, nuestra lista de reproducción es triste y deprimente. No pasa nada porque, de vez en cuando, uno se siente triste solo porque sencilla y llanamente echa de menos.