La más cosmopolita de las ciudades españolas es un mundo único de rincones mágicos a los que se puede acceder fácilmente caminando por sus calles sin rumbo fijo, a la deriva. A continuación, cinco rutas que no te puedes perder en tu paseo por Barcelona.

El Raval

Este céntrico barrio barcelonés es una curiosa combinación de antigüedad y modernidad, gracias, entre otras cosas, a la moderna construcción del edificio del Museo MACBA de arte contemporáneo. Si eres fan de la ropa vintage, las tiendas de segunda mano, la moda española, el más exquisito café y, por qué no, un poco de turismo por la primigenia Barcelona, esta es sin duda tu zona.

El barrio gótico

Quizá uno de los barrios más bonitos de toda la ciudad. Comenzando por la Plaça del Pi hasta la Iglesia de San Felip Neri en la plaza del mismo nombre y pasando por la Catedral en la Plaça Nova, esta ruta te llevará por calles y callejuelas de la medieval Barcelona en la que además encontrarás numerosas tiendas de joyas, telas japonesas, uno de las mejores zapaterías o las más juvenil moda actual. Además, esta es una buena zona en la que es posible encontrar una buena solución de alojamiento para aquellos que vayáis a pasar unos días. Pueden ser de ayuda sitios como venere.com, en el que puedes ver el mapa de la zona y así elegir lo que más te convenga, viendo a través de él medios de transporte cercanos, monumentos y todo lo que necesites para organizar la visita.

El Born

Conocida por ser una de las zonas de encuentro de la juventud catalana, el Born se ha convertido en la más exclusiva de los barrios de la Ciudad Condal. En él encontrarás las firmas más conocidas y alguna que otra novedad que te dejará sin palabras. Entrar en The Box, dónde encontraréis diseños de jóvenes diseñadores, Ivori, en la que comprar ropa, zapatos y complementos made in Barcelona o La Tercera, establecimiento en el que adquirir ropa y complementos en seda y algodón, pude ser la solución perfecta a un lluvioso día de otoño.

El Paseo de Gracia

Una óptima elección si lo que quieres es combinar turismo y la crème de la crème de la gastronomía catalana. En la más ancha y prestigiosa de las avenidas de la ciudad se dan cita las construcciones más modernas de toda la ciudad, como la Casa de la Familia Battló diseñada por Gaudí, la Pedrera, también diseñada por el genio catalán o la Casa Lleo Morera. Caminar en este barrio es sinónimo de tradicionales mercados gastronómicos como el Mercat de la Llibertat o el Mercat de la Albacería, con productos más populares y tradicionales.

Las Ramblas

La más concurrida avenida puede presumir de tener algunos de los más conocidos símbolos de la ciudad, como el Mercat de la Boquería o la Iglesia de Santa Ana, además de ser un agradable paseo que se inicia en la Plaça de Catalunya y termina a orillas del Mediterráneo. En ella encontrarás tiendas de todo tipo. Puedes comprar zapatos, bolsos y complementos, frutas y verduras, tradicionales dulces catalanes y muchas más cosas que ni te puedes imaginar en este gigantesco mercado al aire libre.

Autor: C.O.