Si eres de las mías y se te da fatal tontear con el personal, es probable que te sientas identificada con los puntos que vengo a explicar a continuación.

1. Intentas contar un chiste y la persona que te gusta no lo pilla.

Esto me pasa un montón. Me pongo tan nerviosa que me salto una parte del chiste, o digo un refrán al revés, o directamente me invento una frase hecha que no tiene sentido y obviamente, no lo pilla.

2. Intentas hacerte la sexy y parece que tienes un tic.

Yo acabo por tocarme tanto el pelo que me lo engraso. Y cuando intento levantar la ceja para hacerme la interesante mis amigos dicen que parezco Carlos Sobera. He dejado de hacerlo.

3. Intentas mostrar interés y no encuentras el término medio.

No quieres que parezca que no le estás escuchando, así que asientes con la cabeza todo el rato hasta parecer una loca.

giphy

 

4. Intentas tontear y acabas ofendiendo al personal.

Esto me pasaba más antes, pero mi forma de ligar era vacilar al chico en cuestión. Me metía con mi crush constantemente para intentar genere un vínculo y mostrar interés. Nunca funcionó.

Chica, retírate
Chica, retírate

5. Intentas pasearte delante de él a menudo para que te vea y en vez de llamar su atención, acaba huyendo porque cree que quieres venderle algo.

Sí, me ha pasado, qué pasa.

6. Intentas que no se note lo nerviosa que estás pero al final consigues todo lo contrario.

7. Intentas estar más atenta por si es que alguien está intentando meterte fichas pero tú no te das cuenta.

Pero las hay que sencillamente tenemos ese radar estropeado, y por más atención que prestemos jamás nos enteraremos y seguiremos dejando pasar oportunidades.

¿Pero en serio me estás diciendo que yo le gustaba?
¿Pero en serio me estás diciendo que yo le gustaba?

Lo peor es que parece que a ligar no se aprende, así que es mejor tomárselo con humor…