WARNING: Las dos chicas de la foto de portada, no son hermanas. Son dos desconocidas.
Yo tengo el síndrome de la hija única. Mi hermana y yo nos llevamos casi 10 años lo que significa que cuando yo empecé a beber a los 16, mi hermana tenía 6 y jugaba con peluches y es por eso que tengo el síndrome de la hija única. El caso es que cuando yo era pequeña y estaba creciendo solica, sin hermanos con los que jugar y tirando de imaginación, siempre pensé en qué sería eso de tener una hermana gemela (o melliza, o mellizo) con el que jugar o ya si eso un hermano corriente, pero más cercano a mi edad.
Veía a mis primas que se llevan año y medio y me daba envidia eso de crecer con alguien con quien podías compartir cosas, ropa y momentos. Todo muy triste sí.
Ya después en mi adolescencia, pues me pasaba eso que alguna vez me decían: “He visto a una persona que se te parece” y luego no se parecía en nada, y como soy un poco creída, llegué a la conclusión de que mi cara era UNIQUE y que no me parecía a nadie ni nadie se parecía a mí. FIN
Pero no, el planeta es grande y ya se sabe que todos tenemos un gemelo por ahí escondido, así que unos listos que se me han adelantado, porque let’s face it, aunque esta idea la tuve yo hace más de 15 años, Twin Stranger se han adelantado para crear una web en la que puedes subir tus fotos y encontrar gemeliers ocultos por el mundo. Gemelos a la carta.
Hay gente de todos los países y no lo hace de forma automática así que después de hacer un pequeño test inicial en el que escoges algunos rasgos característicos de tu cara, toca ir diciendo “si y no” como en el Tinder, pero con gente que potencialmente se pueda parecer a ti.
La gracia de esto está en que realmente encuentres a alguien que sea igualito que tú y cumplir ese sueño adolescente de ser adoptado, o que tienes un gemelo al que separaron al nacer (o que alguien robó) o como en la película de las gemelas Olsen “Dos por el precio de una” en la que no se menciona para nada la posibilidad de que sean hermanas.
