Añoro esos años donde las vacaciones de Navidad eran eso, un par de semanitas en las que desconectar de tus quehaceres donde había tiempo para salir, dormir hasta mediodía, empacharte de turrón mientras veías a Schwarzenegger (sí he buscado en Google para escribirlo) buscando un Turbo Man y hasta para leer. Sí, si había intención podías leerte tranquilamente un par de novelas repanchingada en el sofá.

Pero esos tiempos pasaron y ahora entre el trabajo, la familia, los compromisos y que normalmente no sacas tiempo ni para pintarte las uñas decentemente, terminar o empezar el año con un libro entre las manos es complicado. Por eso, para todas aquellas que no quieran renunciar a encontrar un tesorito oculto entre líneas hemos elaborado una lista de 5 libros cortos para disfrutar en cualquier momento.

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Siempre hemos vivido en el castillo, de Shirley Jackson

El título ya te invita a querer saber un poquito más y al menos una pregunta se cruza en tu mente «¿siempre?». Intriga, cierto terror y muchas ganas por querer saber más sobre la vida de Mary Katherine Blackwood, su hermana Constance y su tío Julian en un entorno asfixiado por las supersticiones y el deseo de que todo siga igual.

Si te gusta Stephen King o eres de las que empatiza rápidamente con los personajes esta novela te encantará.

A cuento de nada, de Rafa Pons

Los libros de cantautores están de moda pero éste me pareció de los más originales. No vas a leer sobre sus canciones, letras o historias de amor como suele ocurrir con otros similares. Este libro es un compendio de historias cortas, algunas son relatos de cuatro líneas y otras ocupan tres páginas pero ninguna de ellas te deja indiferente. Si algo sabe hacer muy bien Rafa Pons además de rasgar la guitarra es componer historias originales que huyen de los clichés y en este libro lo ha vuelto a hacer.

Leyendas, de Gustavo Adolfo Bécquer

Como la Mayonesa en las fiestas del pueblo, es un clásico que nunca falla. Si no te mandaron este libro en el colegio (era uno de los pocos que terminé con una sonrisa en la cara) te recomendamos que le des una oportunidad porque estamos seguras de que por mucho que digas «una página más y me voy a dormir» no lo vas a soltar hasta que no te termines la leyenda.

Aunque todas son preciosas, El beso y El Miserere se han ganado una merecida fama entre todas sus historias cortas.

Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes, de Elena Favilli

Es el más largo de todos, 224 páginas, pero si contamos que resume la vida de 100 mujeres que han hecho historia te da tiempo a leerte un par de ellas mientras Ramonchu explica cómo van los cuartos. Es un libro perfecto tanto para cogerlo a ratitos y enterarte muy por encima de las hazañas de estas increíbles mujeres como para regalárselo estas navidades a los peques de la familia (si las niñas hemos leído sobre chicos toda la vida ya es hora de que los niños también sepan quién fue Jane Goodall o porqué las mujeres debían publicar sus obras bajo un seudónimo masculino).

El Principito, de Antoine de Saint-Exupéry

Imprescindible y recomendable a cualquier edad. Todos hemos leído frases porque como Los Ramones, el habitante del asteroide B 612 también sale en camisetas. De hecho en los últimos años hay merchandising chulísimo de este libro pero ninguno se puede comparar con pasar una tarde descubriendo su historia o redescubriéndola porque es un viaje del que aprendes algo en cada parada.

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