Estos días se ha viralizado el siguiente tweet (y con razón):

La sorpresa llega cuando buscamos el artículo del que han salido las capturas que comparte @pauladeviguri y ¡oh, sorpresa! no aparece por ninguna parte. Nos pasan el enlace y nada, sale roto… no existe, lo habrán borrado después del aluvión de críticas que han recibido. Pero claro, sin disculparse, ni dar a entender que han entendido el mensaje y que van a tener en cuenta que esta mierda tóxica ya no nos vale. Y ahí están, como siempre, los sentimientos encontrados: por una parte es un epicwin que lo hayan borrado, por la otra da rabia pensar que esto va a seguir pasando aunque sea de forma más sutil, porque esta publicación (como tantas otras revistas femeninas) está cargadita de artículos y tópicos sobre la operación bikini… que ya sabéis que lo único que nos preocupa a las mujeres es adelgazar (ahá okey yeah!).

El mensaje que transmiten con este tipo de publicaciones es el de siempre: «el cuerpo de una mujer siempre podría estar mejor (o por lo menos desearlo)». Pero en este caso va un pasito más allá y, como dice Paula en su cuenta de Twitter, es REPUGNANTE. Lo que nos esperamos de un artículo que se titula «Las celebrities que enseñan celulitis sin complejos», es un mensaje potente y empoderador… pero no, lo que nos encontramos es mofa, malas formas y la idea de que la culpa es de ellas por no cuidarse (¡con la de pasta que tienen para dejarse en tratamientos de belleza, cómo osan!). Intentar empoderar a alguien ridiculizando a otra persona es de una bajeza moral increíble. Intentar ponerse el disfraz body positive y hacerlo mal está a la orden del día.

collage

En nuestra opinión que sigan existiendo publicaciones que juzgan el cuerpo de las mujeres tan duramente, normalizando una relación tóxica con nuestras corporalidades, fomentando la comparación entre mujeres y vendiendo mentiras como que la celulitis es algo anormal (o que Kate Moss tiene cartucheras, WTF!), es algo muy grave y un claro reflejo del mundo en el que vivimos y de todo lo que queda por hacer. Afortunadamente cada vez hay más personas que están cansadas de estas mierdas y que se atreven a hacer públicas sus quejas en las redes sociales, dando visibilidad a la necesidad de un cambio de paradigma estético que se adapte más a las demandas de una sociedad que poco a poco va despertando del letargo lisérgico de la dictadura estética.

Así que, por si no había quedado claro… Querida revista QMD: las mujeres tenemos celulitis, estrías, vello corporal, michelines, culo carpeta, pechos grandes o pequeños… las mujeres somos diversas, fuertes y estamos hartas de tanta tontería.