Hay frases que se suelen decir, en general para quedar bien, y que lo que te hacen quedar es como el puñetero culo, y aún así se siguen diciendo. El motivo no lo sé, pero ya he encargado un estudio a la Universidad de Oklahoma, que claro las frases serán otras, porque allí no hablan español pero seguro que hacen un estudio de lo mas currado de porque se siguen diciendo cosas como : «Hello , darling, te has puesto cual botijo o estas en cinta». (Esto lo leéis en tono ingles que sino no hace gracia).
– ¿Estás embarazada?. Es una típica pregunta que se le suele hacer a las gordas que tienen barriga, y que se sabe perfectamente la respuesta, pero que la gente se empeña en seguir haciendo. Y si sabes que el 90% de las veces vas a meter la pata. Además yo creo que ni siquiera a las propias embarazadas les hace gracia que se les pregunte si ellas no te lo dicen. Así es que: «¿Por qué no te callas?».
– No estás mal para la edad que tienes. Con esto te están diciendo que ya eres vieja pero de momento conservas la dignidad, aunque estás a una raya de perderla. Porque si estás en una edad joven no has de parecerlo, ya lo eres. Vaya que eres viejo. Fin.
– Te conservas muy bien. Yo cada vez que alguien me ha dicho esto me imagino a mi misma dentro de una lata con mis hermanas sardinas todas apretadas y sin poder respirar porque nos han ahogado en aceite. Pero oye, lo que haga falta para seguir tiesas y jóvenes.
– ¿Tú eres la del instituto? Madre mía cómo has cambiado. Aquí lo que te están queriendo decir es que te quedan dos telediarios de vida, o que la vida te ha tratado muy mal. Pero yo digo. «Lo raro sería siguiera con los brackets y el acné ¿No?».
– ¿Tú lees eso? Nunca lo hubiera dicho. Esto es muy habitual en los círculos de gente que va de culta y guay que de repente te ven sacar del bolso un libro que no es la revista Hola, y ya flipan en colores de que no seas tan tonta como ellos pensaban.
– ¿No llevas el pelo un poco largo para tu edad? Cual es la puñetera edad que dice la ley que debes cortarte el pelo porque si no te quitan los puntos del carnet o hacienda te pega un sablazo que no puedes volver a ir a la pelu y te lo tienes que cortar sí o sí . Pregunto.
– ¿Ese es tu novio?. Da igual si tu novio es un actor de Vikings o un orco de mordor. Si se pasa de guapo no se entiende que te ha visto a ti que eres tan del montón. Y si es feísimo, entonces es que está forrado, y si no tienes novio pues es que no te quiere nadie. Chica que lío.
– No tenemos nada de tu talla. Yo una vez entré a una tienda a comprarle una camiseta a una amiga y la dependienta me miró y me dijo: «No tenemos nada de tu talla» y le contesté: «Ya, le estoy comprando ropa a mi muñeca, ya sé que aquí no hay ropa de adultos». Y fin de la conversación absurda.
– ¿Lo quieres para regalo? Esta es una pregunta que te suelen hacer siempre siempre que compras algo que se supone que no es muy de chica, como un taladro. Tú te vas a una ferretería y compras un taladro inalámbrico modelo GSB y te van a preguntar sí o sí, si es para regalo. Porque claro ¿Cómo una chica tan mona y delicada va a saber usar un taladro? Que yo la última vez que compré uno estuve a punto de responder: «¿Antes de envolvérmelo lo podría probar en su cerebro a ver si va bien y recoge en la cavidad la sangre que sale? Gracias».
En resumen, creo firmemente que cuando alguien te suelta una frase grosera o que no viene a cuento, la respuesta ha de ser del mismo nivel o algo incluso más surrealista que la deje callada o callado, que es como debería estar para parecer más joven y más inteligente.
