Da igual tener la misma nariz (hola papá), el mismo pelo (hola mamá), vestir ropa parecida o hablar con el mismo tono de voz. ¡Si no tenéis la misma talla, es imposible que seáis hermanas!  Y es que la gente es incapaz de ver más allá de lo obvio.  Pero eso sí, con esa amiga con la que compartes talla, seréis como dos gotas de agua para el desconocido que se topa con vosotras.

sisters_avr-01N.D.A; Basado en hechos reales al 100%