Si nadáis en la abundancia y podéis hacer cualquier plan sin calcular -con más o menos angustia- los euros que os vais a gastar, dejad de leer y que sepáis que me caéis mal. Pero para las que no tenemos ni un euro ahorrado y queremos seguir haciendo planes divertidos este verano, os traigo una maravillosa lista de cosas que hacer bonitas, chachis y baratas o incluso gratis.
Nota mental: a casi todo se le puede añadir vino, cerveza o cubatas, pero esto ya es opcional.
1. Conciertos y festivales gratuitos
El verano es tiempo de festivales y conciertos al aire libre. Y no todos son carísimos, de hecho podemos asistir a conciertazos totalmente gratis.
¿Por ejemplo? En el Heineken Jazzaldia en San Sebastián: Puedes ver gratis en la playa de la Zurriola a KAKKMADDAFAKKA, Jamie Cullum o Jimmy Cliff. O el Zaidín Rock en Granada: entrada gratuita para ver a grupos como Corizonas o Dover. No dejes de mirar las agendas culturales de tu ciudad porque siempre hay conciertos interesantes a los que ir a pasar un buen rato.
2. Picnic con mantel de cuadros
Cuando no tenemos euros para ir a comer cada sábado por ahí, pero pasamos de quedarnos en casa, una buena opción es montarnos un cuqui picnic. Siempre con mantel de cuadros. En tiendas como Tiger podemos encontrar millones de accesorios para hacer de nuestro picnic el más bonito del mundo. Y currarnos unos buenos sandwiches, un poco de queso, un vinito… planazo.
3. Picnic alcohólico nocturno
Eeeh, sí, podría decirse que es un botellón… Seguramente, tiene menos cero elegancia pero cuando el calor y la economía aprietan hay que ingeniárselas. Un grupo de amigos, algo de cena take away y unas cervezas ( si aquí te pones con la ‘priva’ de verdad ya sí que es un botellón en toda regla). Puede ser el plan perfecto para esas noches de verano tontas que tu ciudad está a medio gas.
4. Camping
Ya que no te puedes ir de festivales a acampar guarramente, vete a acampar limpiamente. Rebusca tu vieja tienda de campaña, sí esa que te compraste para un festival y todavía apesta. Saca tu mochila, tu ropa cómoda, los bikinis y tu espíritu campestre, ya solo te queda elegir alguno de los cientos de cámpings en sitios preciosos que tenemos en este país.
5. Ir al río
Cuando la playa te queda lejos, seguro que tienes algún río cerca. Es el plan perfecto para las tardes axfisiantes en la ciudad, un baño helador en el río y vuelves como nueva. Y encima has ido al campo a respirar aire fresco e igual hasta tienes que andar un rato, estás hecha una sanota.
6. Cine al aire libre
Prácticamente todas las ciudades tienen un programa de cine al aire libre, en algunas con mejores películas que en otras, pero no deja de ser un buen plan para las noches de verano. Encima en muchos casos, gratuito. A esto, como a casi todo, se le puede añadir unas latas de cerveza.
7. Tarde de manualidades
Tienes un tablón de Pinterest lleno de ideas que nunca has realizado. Ha llegado el momento de hacer algo más que Pin it. Ese montón de tarros de cristal que vas guardando para reciclar están esperándote para que les des una vida nueva y hagas algo bonito y barato para tu casa.
8. Sesión de belleza casera
Si rebuscas en tu baño, seguro que encuentras un montón de artilugios para la manicura que has ido comprando y acumulando a la espera de este día. Pues ya ha llegado, monta una ‘nail party’ con tus amigas en casa y haceos las uñas entre vosotras. Puede acabar muy bien o muy mal, pero será divertido seguro.
Aquí puedes cambiar las cervezas por algo más moni tipo mojitos.
9. Monta un minimercadillo entra amigos y conocidos
Vacía tu armario de una vez y convence a tus amigos y conocidos de que también lo hagan, quedad en algún lugar común, una casa, el bar de siempre, alguien que ponga unos discos, unas cervecillas … y ya tenéis vuestro propio mercadillo vintage. La idea triunfa, de verdad! Siempre se encuentran maravillas que otros han descartado y tú puedes deshacerte de ese montón de vestidos que has acumulado durante años en el rincón de ‘ya me los pondré’.
