Querida Marta,

hace apenas unos minutos que llegó a mí una imagen con uno de tus stories de Instagram y me he visto un poco en la necesidad de escribirte estas líneas. Creo además que soy la persona indicada para hacerte llegar estas palabras, no por quién soy (que ya te digo que no soy nadie), sino porque no te conozco en absoluto y quizás esto me otorga una objetividad que otras personas no tienen contigo.

Voy a empezar poniéndote en situación querida Marta, soy una mujer de 34 años, mido 160 centímetros y mi peso ronda los 105 kilos. Efectivamente, todos mis informes médicos versan en sus inicios ‘Mujer obesa…‘, pero a su vez también dicen de mí que soy una persona sana. ¿Y por qué te cuento yo esto, querida Marta? Porque leo en cada uno de tus comentarios que eso de referirte a las personas ‘menos delgadas’ (como tú nos llamas) como gente que no se cuida, que tiene problemas de salud, es casi una constante.

Dilo Marta, dilo con todas las letras, somos gente GORDA, al igual que tú eres delgada. Somos gordas, altas, bajas, rubias o morenas. No pasa nada. Esa estigmatización de la que tanto te gusta hablar y que tanto sueles criticar nos la estás pasando a nosotras. Y créeme querida, llevamos demasiados años cargando con esa losa como para que vuelva la mula al trigo. No Marta, que la industria de la moda esté cambiando y al fin se admitan todo tipo de cuerpos no es un ataque a las modelos delgadas. ¿Calvin Klein incorpora chicas curvy en sus campañas publicitarias? Por favor, cuéntanos qué mal puede hacerte a ti eso. ¿Eres una mujer profesional que hace bien su trabajo? Adelante, sigue con lo tuyo, y que la industria continúe adelante, porque a la sociedad no le ha costado poco entender que tu cuerpo y el mío (por poner un ejemplo) son igual de bonitos y válidos.

Me llama mucho la atención esta parte de tu comentario ‘Estar delgada y cuidarse es estar sana, al igual que estar menos delgada y no cuidarse pero no tener un problema de obesidad‘. Chica, yo no sé si es que no te entiendo o que te has ido un poco del mensaje. Pero no estaría de más que dejaras de achacar el cuidarse menos a las personas que no son delgadas. Solo como consejo.

Personalmente no trabajo en el mundo de la moda, pero esas modelos curvy que tú crees que no deberían llamarse de ese modo, tienen el mismo derecho y las mismas posibilidades que toda modelo delgada que según tu punto de vista lucen cuerpos realmente bonitos. No me meteré en tus gustos, faltaría más, pero ya que hablamos de lo estético… igual habría que repetir aquello de ‘para gustos los colores, y para olores, flores‘. Y he aquí donde se encuentra ese gran paso que ha dado la industria de la moda abriendo sus puertas a modelos con todo tipo de cuerpos, porque quizás lo que a ti te parece un insulto a la salud, porque es tu opinión, a otras nos parece un cuerpo real, válido, que también merece visibilidad. Porque a mí, querida Marta, también me gusta ver cómo sienta la ropa en modelos con cuerpos similares al mío, porque no somos menos por pesar más.

Lo que preocupa es que una persona con tal cantidad de seguidores en redes sociales de cabida a mensajes gordofóbicos una y otra vez. Lo estás gestionando realmente mal, cuando la cuestión es increíblemente sencilla. ¿Te envían mensajes criticando tu delgadez? Fatal por parte de quien lo hace, pero igual de feo es que cada vez que esto te ocurre tú te escudes en que la gente deje de fomentar la obesidad. Para defender una causa no se machaca otra.

El tiempo nos ha enseñado a unirnos para defender todo tipo de cuerpo, el tuyo que es delgado y el mío que es gordo. ¿Quieres que la sociedad deje de criticarte? Hazlo tú también. Es mucho menos tóxico que ese mensaje que lanzas una y otra vez sobre el daño que te hace ver una modelo curvy triunfando.

Pides que dejemos de glorificar la obesidad, ¿y qué hacemos los gordos entonces? ¿Caemos en depresiones y hábitos que nos hagan entrar en un bucle de obsesión y asco por nosotros mismos? Oh vaya, esto es lo que nos han estado vendiendo hasta hace poco tiempo…

No Marta, ya es hora de evolucionar y ojalá seas capaz de verlo. Que te gusten esas modelos de los 90 no debería tener que significar que tu ideal se haya quedado en aquella época. Sigue tu trabajo y empieza a respetar a los que te rodean. El fin de ese acoso que tanto reclamas, que sea general.

Recibe un cordial saludo.

Mi Instagram: @albadelimon