Desde el ayuntamiento de Barcelona han alertado de que las «apps» de contactos para ligar fomentan la sífilis y la gonorrea debido a un aumento en los casos en la ciudad de más de un 82% en un año.

Advierten pues que estas aplicaciones facilitan en exceso los contactos sexuales, con lo que crece el riesgo, y que han tenido que aumentar el presupuesto municipal para hacer frente a las infecciones un 42% en dos años ( aumento  de presupuesto para vividores folladores se llama).

Por eso este año la alcaldesa de la ciudad condal decidió poner las mismas luces de navidad que el año pasado, era o curar gonorrea o gastar en luces, o gonorrea o luces… Y claro ganó claramente Gonorrea, con ese nombre como para no ganar.

Hombre teniendo en cuenta que Tinder por ejemplo, te une por tus gustos en Facebook. O sea que si tú un día de borrachera le has dado me gusta a  páginas que se llaman “Me mola la gonorrea” y “Mato por un Bing Mac”, pues Tinder deduce que te lo vas a comer todo y que te da igual si está podrido o no. Y te empareja con uno que tiene las pelotas hinchadas como dos melones. Porque os informo que la gonorrea inflama los genitales y crea un flujo excesivo. Eso quiere decir que a partir de ahora cuando veas  un pollón desconfía. Ya no vamos a saber si el tío está bien dotado o infectado. Y si eres chico igual. Si te vas con una chica y de repente se moja toda, ya no sabrás si es que la pones perraca o es que tiene el chichi en cuarentena.

Yo apelo a la bondad de estas apps de ligoteo a que cuando detecten que dos personas han quedado, envíen un motorista con una cajica de condones al domicilio de la cita. Y mejoran el servicio, con una calidad y un detalle, que ni los hoteles de cinco estrellas. Porque con el precio de los alquileres los jóvenes no tienen ni para condones. ¡Hombre ya!

 

 Mira yo con la gonorrea entiendo que uno se confunda y la líe ¡pero con la sífilis no! Que en wikipedia sale que se contagia con el contacto con las llagas abiertas que hay en los genitales. A ver, que yo comprendo que la cosa está mal, pero si ya veis alguien con la pilila o el chirri lleno de llagas, huid. Que estáis muy perdidos en la vida.

Y ahora dicen que estas enfermedades están creciendo en todas las ciudades europeas. Porque claro la gente tiene un vicio que ya no van a Roma a ver el Coliseo, llegan allí se conectan al Tinder y dicen: «A ver, barra de mozzarella cercana» y a follar. Total el Coliseo si no se ha caído, no se va a caer ya. Ya lo veré en otro momento.  Y así pues de una ciudad a otra. En las ciudades de interior se detectan más casos, eso es normal, como no tienen playa ¿qué hacen? Pues nada a revolcarse al monte.

 

Así es que aunque todo este despropósito no sea culpa nuestra, pues id con cuidadín con el desenfreno, y mientras los condones no entren por la seguridad social, haced una hucha o algo y compráis unos pocos. Y de lamer pues mejor chupad piruletas porque hasta el sexo está en crisis. ¡Y eso que es de los pocos placeres que no engordan, y son gratis!