Mi novio me confesó que pegó a su ex.

Si te soy sincera, este fue un momento en el que nuestra relación se tambaleo e hizo que me cuestionara con qué tipo de persona estoy saliendo. Porque en cuanto me lo contó, mi reacción instintiva fue protegerme.

Antes de nada, empecemos por el principio. Cuando me lo contó, llevamos 3 años juntos. Desde el momento que le conocí, he visto en mi novio una persona cariñosa, cercana, honesta, sensible, responsable y que realmente sabe lo que es trabajar en equipo.

Cuando nos conocimos, los dos veníamos de relaciones muy tóxicas y aunque nos costó sincerarnos respecto a lo que habíamos pasado en nuestras relaciones, poco a poco nos fuimos abriendo.

Cada vez que él me hablada de su relación lo hacía con pena y tristeza.

Siempre llegaba a la conclusión de que ella era una persona genial, pero que la suma de ellos dos, no era compatible.

Por lo que me ha ido contando durante estos años, vivió mucho tiempo en una relación tóxica y dependiente. Tóxica porque su pareja no tenía una vida más allá de él y siempre le exigía dedicarle la totalidad de su tiempo. Cargó con una persona emocionalmente dependiente y con ataques de ira.

Cuando empezamos a conocernos, a menudo me daba cuenta de que él siempre esperaba que yo reaccionara de manera violenta, con gritos o exigencias.

En algún momento tuvo que pasar el fin de semana fuera o simplemente no podía quedar, y se disculpaba de mil maneras para evitar un conflicto. Su conducta habitual era intentar disculparse por absolutamente todo. Cuando empezó a comprender que yo también tengo mi vida, mis amistades y mis aficiones, pude darme cuenta de que no estaba acostumbrado a estar con una mujer independiente, porque no sabía cómo gestionarlo.

No hizo falta que me dijera que su expareja tenía por costumbre insultarle o faltarle al respeto, porque podía ver claramente en su autoestima y en su manera de tratar conmigo, todos sus antecedentes.

De la misma manera que yo podía leerle, el empezó a darse cuenta de que, cuando me sorprendía en una habitación o hacía un gesto brusco, mi reacción era girar la cara, cerrar los ojos y protegerme.

Poco a poco fuimos leyéndonos y nos dimos la mano en muchos traumas y malas experiencias hasta que conseguimos superar ciertos miedos o conductas.

¿Y qué es lo que pasó? Que una noche mi novio me confesó, que pegó a su ex.

Me puso en contexto y me explicó la situación. Se trataba de una discusión en la que su expareja le confesó que le había sido infiel entre risas y burlándose de él. Él decidió cambiar de habitación pero su ex le persiguió empujándole y diciéndole cosas como «¿Qué? ¿Te vas a escapar? ¿Quieres que me vuelva a ir de casa a follarme a otro de nuevo?»

Él intentaba quedarse a solas en una habitación mientras ella le perseguía y le empujaba constantemente, entonces él se dio la vuelta, la empujó con fuerza y la tiró al suelo.

Y mientras él me contaba la situación entre lágrimas con el dolor aún reciente, yo pude sentir como volvían a mí todos esos fantasmas de mi pasado.

No puede evitar pensar que había caído de nuevo en el mismo error: volver a elegir a una persona que volvería a abusar de mí. De manera inconsciente, me cerré y me sentí insegura a su lado.

De manera involuntaria me distancié de él y empecé a sentir rechazo cada vez que él me intentaba contactar.

Hasta que un día, me paré a pensar en todas las cosas que había vivido a su lado. Recordé el dolor con el que me hablaba de su antigua relación y cómo le temblaba la voz cuando me contó aquella situación.

Y como me dijo mi terapeuta en aquel momento, el objetivo es alejarse y sacar de nuestras vidas a personas que intenten someternos y hacernos vivir en una situación de constante de abuso. El perfil de un hombre maltratador, no es el perfil de un hombre abatido porque en un momento empujó a su expareja.

Intenté dejar de lado los miedos que me condicionaban e intenté verle de manera objetiva. Quise prestar atención a todo lo que YO había visto en él y dejar de pensar que un momento dado pegó a su ex. Y es cierto, yo nunca había estado con un chico que respetara tanto mi libertad y mi independencia.

Pero como ya sabemos, nuestra experiencia personal no tiene porque ser la norma o lo sano y por eso, precisamente:

Es necesario no bajar la guardia y observar continuamente y sacar conclusiones de las conductas de una persona.

También me paré a pensar en todas las mujeres que de esa misma manera, pensarían que su pareja ya no era ese tipo de persona. Y que probablemente, acabarían dándose cuenta de que efectivamente, estaban compartiendo su vida con una persona abusiva. Es muy complicado desmigar la realidad y protegerse antes de que empecemos a vivir los primeros síntomas. Por eso es vital mantenerse rodeada de buenas amistades y familia en la que puedas confiar.

A día de hoy, llevamos 12 años juntos, tenemos 2 hijos en común y creo que es imposible que hubiera encontrado a una persona que me permitiera crecer tanto a nivel personal.

Los dos vinimos de relaciones completamente tóxicas. Y los dos decidimos darnos una segunda oportunidad, conocernos y permitirnos crecer y aprender de nuestros errores juntos.

Anónimo

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