Lo primero que he hecho al entrar hoy en Facebook ha sido ver este video en el muro de mi preciosa Iratxe.
Sí. Lo de maravilloso se queda corto. Y sí, acabas de ver al bombonazo de Tess Holliday en el minuto 0:30 con un conjunto rojo y rosa.
Los chicos de H&M nos enseñan que en la moda hay muchas normas establecidas, pero que hay que hacer caso omiso a todas ellas excepto a una, la de reciclar tu ropa. Ya hace varios años que puedes encontrar en los establecimientos de la marca una especie de ‘papeleras’ para depositar tu ropa y, a cambio, te dan un descuento de 5€ para tu compra. La cosa va así:
Tráenos las prendas que ya no quieres, de cualquier marca y en cualquier estado, y deposítalas en los contenedores de recogida que hemos dispuesto en nuestras tiendas. De allí serán transportadas hasta una planta de procesado donde serán clasificadas en tres categorías:
Segunda mano: La ropa en buen estado y que puede volver a utilizarse se comercializa en distintos países como ropa de segunda mano.
Reciclar: Los tejidos que no pueden reutilizarse, reciben una segunda oportunidad como fibras textiles. De esta forma, las prendas viejas se transfroman en prendas nuevas. Al fin y al cabo, ¿qué puede estar más de moda que la moda sostenible?
Reutilizar: Las prendas desgastadas o rotas se transforman en otros productos, como materiales aislantes o trapos de limpieza.
Si hoy utilizamos un 20 % de fibras recicladas para confeccionar prendas nuevas, en el futuro será el 100 %. Todas las prendas que llegan a nuestro programa de recogida son recicladas.
¿Te apuntas a reciclar?