Hasta hace unos días, ni siquiera había oído hablar de Charli Howard. Hoy, tras la polémica desatada por la carta de Gigi Hadid en Instagram, esta modelo salta a la palestra tras mandar a su agencia de modelos a la mierda en una carta, en la que asegura no estar dispuesta a cortarse los huesos de sus caderas para entrar en sus estándares.
Pero pongámonos en situación. Esta modelo, que pertenece pertenecía a la agencia británica Wilhelmina London, mide 1.72 y lleva una talla 34…Una 6 del primark, para que nos entendamos. La talla que yo no uso desde mi 6º mes de vida… Analicemos sus palabras para entender cómo este mundo se va al carajo.
«Ahí va un gran FUCK YOU a mi (ahora ex) agencia de modelos por decir que 5.8 (1.72) y una talla 6 -8 , soy demasiado grande y estoy fuera de forma para trabajar en la industria de la moda» Chica, ojalá más modelos hicieran lo mismo y se rebelaran contra ese mundo que dictan un modelo de mujeres (casi siempre) enfermizo.
«No voy a dejar que ustedes dicten lo que está mal en mi forma de verme y qué necesito cambiar para ser «hermosa» (como perder 1 puta pulgada de caderas) con la esperanza de forzaros a conseguirme trabajo» Desde luego,más delgada no significa más hermosa.
«Me niego a sentirme avergonzada y triste a diario por no cumplir con sus ridículos estándares de belleza, mientras se sientan en sus escritorios cada día engullendo tartas y galletas, soltándonos a mí y a mis amigos lo que es la belleza. Cuanto más nos fuerzan a perder peso y ser más pequeñas, más tienen los diseñadores que crear ropa que encaje en nuestras tallas, y más enferman las chicas jóvenes. Esa ya no es la imagen que elijo representar» Al final son los de las agencias los que pudren el mundo de la moda, sentados en sus pedestales. Me alegra que te hayas dado cuenta y hayas salido por piernas. Pero no te metas con los engullidores de tartas, que molamos y no nos metemos con nadie.
«En caso de que no lo hayan notado, soy una mujer, soy humana, y no puedo milagrosamente cortarme los huesos de la cadera solo para adaptarme bien a una muestra de ropa o para llegar a los estándares de la agencia. He luchado mucho contra la naturaleza porque ustedes definían mi figura como curvilínea, pero hace poco he empezado a amar mi figura. No tengo grandes tetas, pero mi culo está bien y a la gran mayoría de mis clientes les parece bien» Aunque pudieras, no te cortes nada. Ya demuestras que te quieres por encima de los estándares. Lo de curvilínea no sé donde te lo ven, pero lo achaco a que engullendo tartas y galletas diariamente, la diabetes les ha comido la vista.
«De todas maneras, afrontemos los hechos : cuando pesaba 47 kilos, todavía no era lo suficientemente delgada para ustedes. Cuando iba al gimnasio 5 veces por semana, tampoco me encontraban trabajo. No puedo ganar» Con 47 kilos y 1.72, se te lleva el viento. Promoviendo una enfermedad en chicos y chicas impresionables, y en ti, evidentemente. Siempre querrán más, más delgada, más alta,…
«Irónicamente, adoro ser modelo- la gente que he conocido, los lugares que he visitado- y estoy orgullosa de los trabajos que he hecho. Continuaré a hacerlo, pero bajo mis propias condiciones. Mi salud mental y física es más importante que un número en una escala, por mucho que ustedes enfaticen eso» ¿Cómo no te va a gustar lucirte y ganar dinero por ello? Pero lo primero eres tú, que nadie te lo arrebate.
«Hasta que (y si) alguna agencia quiera representarme como yo misma, mi cuerpo y la mujer que voy a ser,me llamen. Hasta entonces, estaré fuera en Nando’s (cadena de comida rápida). Sí mi niña, cómete unas papas o algo, que eso no era vida ninguna.
La agencia no ha tardado en responder que no es la primera vez que la chica se enfada y se va, pero viendo el gran apoyo y repercusión que ha tenido su carta, creo que va a ser la definitiva.
No sé ni a qué conclusiones llegar. Me parece deleznable lo que las agencias hacen a sus modelos (sé que no todas son así, pero parece que las más importantes son muy exigentes) y lo que repercute todo esto en la sociedad. Mucha gente pensará que las últimas cartas de modelos son solo un puente para darse a conocer, pero a mí me parece un grito de auxilio en un mundo cada vez más hostil. Espero que poco a poco vaya saliendo a la luz más verdades como ésta, y que las cosas cambien de una vez por todas.
