El 2015 fue el año de Alabama Shakes. La banda norteamericana editó su segundo disco “Sound & Color”, que fue elegido unánimemente por la crítica como uno de los mejores álbumes del año. Formada en 2009 en la ciudad de Athens (en Alabama) esta banda ha sido capaz de crear su propio sonido rock, con reminiscencias de blues, soul y góspel. Si todavía no los conocéis podéis empezar por esta canción y fliparlo mucho:
Pero sin duda, uno de los mayores atractivos de Alabama Shakes es su cantante y guitarrista Brittany Howard. A sus 27 años, Brittany es uno de los máximos fenómenos musicales de la década, con una voz que es un portento y un rollazo plus size que quita el sentido. Años pegada a internet y encerrada en su habitación imitando a Aretha Franklin, Elvis Presley, Janis Joplin o Tina Turner dieron sus frutos; y Brittany se ha convertido por méritos propios en una diva que rezuma actitud, talento y energía.
Brittany lo mola todo. Es un lujo verla en directo, como se desvive cantando cada temazo, se deja el alma y transmite una energía bestial. Además es un ejemplo fehaciente de que la actitud en la vida lo es todo. Está claro que ese vozarrón iba a llegar muy lejos antes o después, pero lo que más admiro de nuestra lady crooner, es como lo vive y como lo siente, con más o con menos kilos a sus espaldas.
Me encanta que en el panorama musical haya divas como ella. Súper rock stars que se suban a un escenario con una guitarra eléctrica a darlo todo, y que la conversación sobre su cuerpo o su peso seo lo de menos. Son un ejemplo para todos. Y tú ves a Brittany cantando y ves a una diosa que te hace levitar con cada canción.
Que además tiene un rollazo increíble y se marca unos lookazos que te hacen aplaudirla y vitorearla fuerte. Me flipa los vestidos vintage que luce, los estampados setenteros, que se atreva con abrigos de pelazo (esperamos que sintético), el corte de pelo con ese tupé tan total, sus gafas de monturas infinitas, y que lleve un tatuaje en el brazo del estado de Alabama solo me hace idolatrarla más y más. ¿Se puede ser más diva?
Para las que os hayáis enamorado de Brittany tanto como yo, os regalo un outfit muy ella, lleno de actitud, de fuerza y energía.
Quereros mucho y darlo todo, rockers!