Las gordas estamos muy acostumbradas a las injusticias, pero yo creo que la que vengo a reivindicar ahora es la injusticia por excelencia. El verano es una mala época para las gordas, esto es más cierto que el azul del cielo. Sudamos, nos cansamos, sudamos otra vez y nos cansamos de sudar. Todo mal. Y si encima todavía no tienes una buena relación con tu cuerpo, peor todavía. Porque encima no vas a sentirte a gusto llevando poca ropa o vas a ser de esas que siempre lleva chaqueta aunque se muera de calor. A ver si se te van a ver los brazos gordos, o algo. Lo sé porque yo he sido así. Pero ahora ya no. Ahora ya solo sudo y me canso.

Y me pongo de muy mala leche porque a mí el calor me irrita y estoy todo el día cabreada y no disfruto de nada. Solo disfruto las dos semanitas que me escapo a Gijón, que, como dice mi padre: «allí se vive», porque podemos dormir tapados por las noches. Ese es el verdadero lujo en la vida, al menos para mí: dormir tapada en verano.

Bueno, pues ya os he contado una cosa que odio. Ahora os contaré una cosa que me encanta: los pantalones. Hay dos tipos de personas en la vida: las que se sienten mucho más cómodas con falda y las que se sienten mucho más cómodas con pantalones. Yo soy del segundo grupo. Para mí no hay nada más cómodo que un pantalón, sobre todo si es de cintura elástica, tipo chándal o tipo leggin. Yo soy feliz con mis pantalones. Disfruto.

Pero parece que el verano es más para faldas y para vestidos. Y yo lo entiendo, pero es que para mí, ir en verano en falda es doblemente incómodo. Lo malo es que para mí, también, ir en verano en pantalones es un puto infierno. Porque me suda la entrepierna que flipas.

Parece que el gran problema de las gordas en verano son las rozadoras de los muslos. Y, a ver, sí, son una jodienda. Gran parte de que a mí en verano no me guste llevar vestidos es por culpa de que me tengo que poner un refajo debajo para que no me rocen los muslos que al final me da calor también y entonces qué sentido tiene que me ponga yo un vestido. Por eso creo que se está cometiendo una injusticia terrible: porque de tanto reivindicar nuestros muslos doloridos y escocidos nos estamos olvidando de una cosa tanto o más importante. ¿Qué hay de los culos sudaos por los pantalones?

Y todavía vendrá alguna lista a decirme: «a ver, cariño, que en verano se pueden llevar pantalones también, pero tienes que comprártelos fresquitos, de algodón, que transpiren, o de lino, que es una tela estupenda para el verano». Lo he probado TODO. Tengo toda clase de pantalones para verano. Cortos, largos, finos, de todos los estilos. Y todos ellos tienen algo en común: que me hacen chorrear por el coño… y no de la forma que me gustaría.

Maldito verano que no me deja estar cómoda ni con unos leggins. ¿Puede haber algo peor en esta vida que pasarte dos meses enteros sudando bragas y dejando huella allí donde te sientes? Porque a mí me parece un auténtico infierno, y esto sí que no tiene solución. ¿Que te rozan los muslos? Prueba esto, esto, esto, esto o esto. Y si no, también puedes probar esto. Y ahora acaban de sacar esto. ¡Qué suerte la nuestra! ¿Que te suda el coño? Pues no hay ninguna solución para ti.

Quiero aprovechar la plataforma que me pone a disposición Weloversize, que me permite llegar a miles y miles de lectores para lanzar un mensaje que debe de ser escuchado: ¡¡¡Inventad algo para que nos deje de sudar el coño y el bajoculo cada verano!!! Bragas con ventilador, ¡algo! Hay mucha gente que sufrimos en silencio el chichi-chorreo veraniego y alguien tenía que decir BASTA. Pues me ha tocado a mí: BASTA de coños sudaos. Queremos una solución.