Si, chicas, redoble  de tambores… porque tras 21 años sufriendo una enfermedad degenerativa y SIN CURA NI TRATAMIENTO ALGUNO por fin he empezado a tomar un medicamento para luchar contra mi enfermedad.

En principio la alegría lo invade todo. La ciencia avanza y esto es maravilloso, como futura científica biomédica no puedo estar más contenta. La ciencia es muy lenta y muy cara… pero cuando consigue sus objetivos hace cosas preciosas.

Cuando era pequeña soñaba con el día en el que me dijeran que me curaría, hasta fantaseaba con verme entrando de pie en clase. Era una de mis mayores fantasías.

Lamentablemente, el mundo no funciona así. Superar una enfermedad tan compleja a nivel médico como la mía no es como encender un interruptor… La parte mala de estar en un ensayo clínico es el grupo placebo.

En los ensayos clínicos te dan una medicina y tu no sabes si eso es placebo (o sea, nada, agua) o si eso es realmente la medicina. El grupo placebo es tremendamente importante en investigación, no es que hagan esto porque sí o por putearte. Es la forma que tienen de ver si realmente el medicamento funciona

Cuando entras en un ensayo clínico, corres algún pequeño riesgo, puesto que son medicamentos que aún no han salido al mercado. Pero en mi opinión, esos riesgos son bastantes pequeños y no me hicieron dudar ni un segundo para aceptar entrar en el ensayo.

Para mi, lo peor de un ensayo, es la dualidad emocional que sientes. Por un lado estás tremendamente feliz por estar en un ensayo clínico… Pero por el otro te pasas mucho tiempo (al principio) preguntándote si lo que te tomas te hará efecto o si solo es agua con azúcar.

Os cuento esto por dos razones:

  1. Para que comprendáis un poco lo complicado que puede llegar a ser, a nivel emocional, estar en un ensayo.
  2. Para que si hay alguien en mi situación, se sienta acompañado y sepa que, es normal sentirte tremendamente feliz y asustado a la vez.

La vida, en general, da miedo y es una montaña rusa. Decide disfrutar los buenos momentos y no cagarte demasiado cuando vengas curvas.