Ya puedo ver los engranajes de todas esas mentes malpensadas funcionado a todo trapo… »pues vaya mierda de colaboradora Loversize con ese pensamiento», parecen decir. »Que le den por no apoyar el movimiento quererse a sí misma y aceptarse», pensarán otros.

Bien, pues estáis todos equivocados… y no lo estáis al mismo tiempo.

Es verdad, lo reconozco: no quiero ser una gorda. No quiero. NO QUIERO.

Pero tampoco quiero ser una flaca. Ni una alta. Ni una ex-gorda. Ni una baja. Ni una rubia. Ni una morena. Ni una teñida. Y no, no me está dando un colapso cerebral, ni voy a convertirme en la mujer invisible de buenas a primeras y a desaparecer.

Lo que pasa, es que me niego a que solo 5 letras lo digan todo sobre mí.

1-I1vnPnSt1jjxDUvuuT78qw

Una persona no es una cosa que pueda resumirse en una única palabra, aunque dicha palabra sea un adjetivo. Una persona, hombre o mujer, mago o muggle, Targaryen o Stark, está compuesto por tal infinidad de detalles, que es IMPOSIBLE que un único vocablo lo pueda resumir.

Puede que sea gorda, es cierto. Pero puede que también sea una persona con un cinismo de esos que enamoran. Buenísima en el juego de mesa, capaz de tomarme una cerveza del tirón y eructar el alfabeto mientras sonrío. Alguien tan friky y tan absolutamente cool que no puedas vivir sin mí.

A lo mejor soy gorda, sí. Pero puede que también sepa tocar música de manera increíble, escriba cuentos para niños, tenga una voz melodiosa y pueda hacer la compra al mismo tiempo que hablo por teléfono con el sitio donde curro, que sea modelo, baile de lujo y hable dothraki.

Es posible que sea gorda, lo admito. Pero también puedo tener una cantidad increíble de aficiones y gustos que te encantarían u horrorizarían. Puedo hacer cosas muy interesantes o totalmente mundanas, ser original, cómica, creativa, divertida, irónica, atractiva, sosa, salvaje, aburrida, comelona, llorona, borde, insoportable, adorable o única, además de gorda.

Pero eso no lo sabes, ni probablemente te enteres nunca, porque ese único rasgo de mí, que estoy gorda, es el que conoces y con el que has decidido quedarte.

Así que no, lector@s querid@s tod@s, no quiero ser una gorda.

Me niego a que un adjetivo, que contrariamente a la corrección lingüística, se usa para DESCALIFICAR, sea un sinónimo de mí El ser humano, como sustantivo, es un conjunto de elementos. Si de toda la vida los adjetivos han servido para enriquecerlo, ¿por qué debo permitir que uno solo sea suficiente para completar mi persona?

No quiero ser una gorda, quiero ser YO, con todos mis complementos circunstanciales de lugar, tiempo y modo. una forma verbal compleja con pasado, presente y futuro. Una mujer en modo subjuntivo que tiene tanto que dar, que no habría análisis sintáctico que pudiera abarcarme.

¿Te atreves a conocerme, o vas a quedarte con una sola palabra?

Foto de portada: Tess Holliday. Imposible definirla con un único adjetivo.