Si tienes un hijo vas a tener la oportunidad de ser el cambio. Con el tiempo y ayuda superarás tu miedo (pero sé sincera con la psicóloga), y podrás empezar el cambio, la forma en que criamos a nuestros hijos lo es todo, y tu sabes perfectamente el camino que no quieres que siga. Ese niño será el amor de tu vida. Ten fe.