Hola Vanilla:
Tienes 27 años, eres muy jovencita aún y con tiempo por delante para el embarazo. Eso para tranquilizar.
Yo tengo 30 y he pasado 2 periodos:
En el primero, tenía de 25 a 27 y me entraron muchas ganas de tener un hijo. Lo sentía así, que era ese el momento. Lo que ocurre es que en verdad no lo era: ni mi pareja ni yo trabajábamos, estábamos en casa de nuestros padres estudiando y los dos teníamos problemas en casa. Con el tiempo me he dado cuenta que aquello, inconscientemente, fue una forma de evadirme y crear otra realidad a la que recurrió mi cerebro. Al final lo dejé con el chico con el que llevaba 4 años porque tenía idealizada la relación y al final todo se fue complicando. Aquello acabó y se me pasaron las ganas. Sabía que quería tenerlo en el futuro pero ya no era inmediato. Podía esperar a que la situación mejorara.
Segundo periodo: El actual. Llevo tres años con otro chico. Los dos con trabajo y a punto de vivir juntos. Se me vuelve a plantear la idea de forma espontánea, pero mi cerebro sigue diciéndome que la situación no es la mejor: mi trabajo no es de los compatibles con bajas maternales, no tengo ahorros como para encargarme yo sola, dependería de mi pareja y mi familia y no estamos casados ni pareja de hecho ni nada. Él es un poco mayor y tiene estabilidad, en su momento, al conocernos, se habló y también quería tener pero no ha vuelto a surgir el tema. Me ha dicho por encima que aún no es el momento. Y yo ahora me planteo que el momento no puede esperar mucho más. Con 30 entre que pruebas a ver si de forma natural puedes y todo eso van pasando unos años valiosísimos. Veo que tendré que plantear la situación aunque no ha surgido de forma natural como me hubiera gustado. Parece que lo estoy pidiendo yo como cosa mía, como que soy solo yo la que quiero. Y en esas estoy. Entiendo perfectamente lo de otras parejas que tienen bebés y crees que no deberían. Yo también me fijo en otros y pienso que me lo merezco más, por decirlo así,y espero que me entiendan. Sé como tú que no está bien y que es un derecho de cada uno en el que no tenemos que meternos, pero somos humanos y esa reacción no es única en ti, la tenemos más chicas créeme,pero no es lo socialmente aceptado reconocer y nos lo callamos. Al final no deja de ser, como una chica ha comentado que me ha parecido perfecto cómo lo define, un pequeño duelo que llevamos y no cerramos, en el que caben la rabia, la tristeza, el rencor, la envidia…
En mi opinión y lo que yo estoy haciendo por ahora, no es renunciar a este sueño, sino hacer un gran esfuerzo mental, que por suerte tenemos la parte racional que nos frena y controla, y cuando vienen esos sentimientos contrarrestar pensando que llegará, pero que por ahora no es lo mejor que le podemos ofrecer, que será más adelante, más preparados. Seguir controlando los impulsos para que no sea una obsesión, porque cualquier tipo es mala, y mientras controlar al cerebro para distraerle y disfrutar con otras cosas. De vez en cuando, sí, ir planeando el futuro, pero con calma.
Mucho ánimo, se puede conseguir.