Las que estamos al lado sufrimos muchísimo. En mi caso, nunca quiso ayuda, ni en intentos fallidos donde nos ponían un siquiatra, tampoco había sufrimiento ni familiar ni económico (ahora sí, nos ha destrozado). Nunca intentó buscar la base del problema, cuando hablábamos del tema ella tenía claro que iba a conseguirlo, que para qué estar aquí. Y aquí los demás, sintiéndonos el resto de nuestras vidas culpables de algo que no hemos podido evitar. No todo son verdades absolutas, ni para un lado ni para el otro. Lo siento, pero no estoy de acuerdo.