Estefanía, la mía también está ingresada justo desde un rato después de escribir el post. Afortunadamente me han dejado saltarme las reglas y visitarla y ha sido mi mejor regalo de Reyes.
Conmigo por fin ha comido y ha estado ronroneando y siendo ella (aunque bufando y gruñendo a los veterinarios que pasaban cerca de su campo de visión, por supuesto).
Chicas, me alegro de que en esta comunidad seamos muchas las agraciadas de experimentar el amor tan bonito de y con nuestras mascotas.
Os mando un abrazo enorme a todas!!