Yo no sé si fue el Tinder el que puso todo esto patas arriba o ya venía de antes; el caso es que las relaciones ya no son lo que eran o por lo menos lo que nos hacían creer que eran.

Puede que yo haya tenido mala suerte y me haya tocado cruzarme con todos los raros del planeta, que puede ser; pero me niego a creer que solo se comportan así conmigo, así que probablemente tú también te hayas cruzado con alguno de éstos y tu relación idílica se haya convertido en el rosario de la Aurora.

Vale que cada persona es un mundo y cada relación un planeta, pero vemos necesario concretar:

1. Si tú eres mi hombreeeeee… y yo tu mujeeeeeeer

Estáis hechos el uno para lo otro, la conversación no acaba nunca, en la cama os entendéis a la perfección, cuenta contigo para todo y tú con él. La armonía y la compenetración es clave en vuestra relación pero… no quiere nada serio.

2. Te cae como el culo pero te empotra fuertecito

Si tú lo tienes claro, no hay problema; pero este tipo de relaciones puede ser mega tóxica. Te cabrea, te cae mal, le odias con todo tu alma y tu corazón, pero abre la boca (para cualquier cosa que no sea hablar) y a ti se te caen las bragas literalmente. Lo vuestro es solo sexo, pero del adictivo, del que por mucho que acabéis a guantazo limpio (metafóricamente, please) os reconcilia y os une.

3. ¿NOVIOS? ¡JAMÁS!

Pero os comportáis como tal. Eso sí, que nadie se atreva a formalizarlo porque os cagáis por la pata abajo. Tanto tú como él.

4. Ni chicha ni limoná

No estás enamorada, ni él tampoco pero chica, hay algo que os engancha y que no sois capaces de explicar. Cada uno tiene su vida, sus aventuras y sus líos, pero hay una fuerza todo poderosa que al final os acaba uniendo un viernes sí y otro también.

5. Ni está, ni se le espera

Estas no suelen durar mucho si eres una persona coherente, pero puede ser que te hayas visto involucrada en alguna de ellas, sobretodo si su origen está en alguna App de ligar tipo Tinder. Básicamente se trata de aquellas relaciones en las que poco más y te piden matrimonio pero nunca tienen cojones a quedar. Son majísimos, tenéis mil cosas en común pero lo de quedar no va con ellos. Yo no termino de entender qué hace la gente con sus vidas y por qué pierde el tiempo de esta manera, pero el caso es que existir, existen.

6. No te quiere, solo le pica la cola

Y le suele picar normalmente los sábados por la noche a las 3 de la mañana, o en su defecto, los domingos de resaca. Eres su comodín para cuando le apetece mandanga de la buena. Vale, sí, a nosotras también nos pica el chichi de vez en cuando, pero entonces escríbeme solo cuando te pique, no me des los buenos días de lunes a viernes y me propongas quedar con un whatsapp ininteligible cada vez que vayas bolinga.

7. Amigos desde la infancia

Solamente os falta follar para que lo vuestro se considere una relación. Feelings hay pero nadie tiene cojones a avanzar y dar el paso. Estás ahí cuando le destrozan el corazón y suspiras por ser tú quien lo arregle.

8. Señor ministro

Te jura y perjura que va a sacar hueco para ti pero jamás lo hace. Cuanto no tiene entrenamiento tiene comida con sus tíos que han venido de Cuenca y sí no es que está preparándose la oposición y claro es una movida hacer un hueco para compartirlo contigo.

9. Hay otra en su vida…

…Y esa otra eres tú, porque está metido en una relación de 15 años y solo le falta el perro para que lo suyo sea una familia feliz con chalet adosado. Te promete que pronto se va a acabar pero es mentira y gorda; aunque tú te agarras como un clavo ardiendo a aquello de: la esperanza es lo último que se pierde.

10. Tu ídolo

Ay amiga, ¡qué jodido es esto! Idolatrar a alguien es un poco cacafuti pero si ese alguien encima sabe perfectamente qué teclas tocar para tenerte comiendo de su mano es más jodido aún. Nadie es perfecto por mucho que tú te ciegues con la venda del amor, que todo sea dicho… eso no es amor, lo que tú tienes se llama obsesión (nainona)

¿Haces pleno? Espero que no.