Hola, Loversizers. Me gustaría compartir con todas vosotras, y con los chicos que también leéis la página, mi experiencia con la desesperación por sentirme querida por alguien que no sea mi familia.
Bien, empecemos por el principio. Soy de esas chicas a las que toda la vida le ha acompañado la fabulosa frase de ‘’qué lástima… con lo guapa que eres de cara’’, obviamente haciendo referencia a que me sobran bastantes kilos. Para que os hagáis una idea, mido 1.60 y peso actualmente 100 Kg, pero por suerte, o caprichos de la genética, estoy muy proporcionada, menos por la tripa, que como yo la llamo, es ‘’colgandera’’. Sí es cierto que nunca me he sentido fea, considero que tengo una cara que puede no resultar desagradable de ver, y por suerte, siempre he tenido una personalidad muy abierta. Lo que puede dar la falsa imagen de que la gente gorda y siempre tiene que ser simpática y sonreír. Ya sabéis, clichés, y esas cosas. Confesaré que a mis más de 25 años, aún soy virgen. Pero virgen al nivel de ni haber besado a un chico. Mis amigas siempre eran las de cuerpazos y las que se llevaban a todos los chicos, y yo, pues no soy una persona conformista en ese aspecto. Por ser gorda, no quiero tener que quedarme con las sobras de nadie.
tumblr_n6b4jztsIU1qj4315o1_500
Bueno, vayamos un poco al grano. He probado páginas de citas a punta pala, y siempre he encontrado gente MUY superficial, que cuando han visto que realmente pesaba lo que decía pesar, pues se volatilizaban o algo así, porque no volvía a saber de ellos. Hace cosa de un año conocí a un chico por internet, él no procedía de ninguna de esas páginas de contactos, sino que fueron casualidades de la vida. Él apareció en mi vida, justo en el momento preciso, cuándo más necesitaba que alguien me ayudase a levantar cabeza y a quererme un poco más. Él me ha aportado muchísimo en este año, muchas cosas buenas, y otras bastantes malas. Nuestra relación se fue estrechando hasta el punto de que parecemos una pareja, pero sin serlo. Debo decir que somos de ciudades diferentes, y nunca nos hemos visto más que por foto. Él sí me ha visto a mí por cam, y ha visto muchísimas fotos de mí, lo cual no es recíproco. Me hizo ilusionarme dos veces con que vendría, y esas dos veces no vino. Y yo, he tenido la oportunidad de poder al menos intentar algo con otro chico, porque sí, ¡por fin un chico se había interesado por mí y de verdad! Pero le rechacé, ¿por qué? No soy tonta, ya sé que podría haber dejado a ese chico e irme con el pretendiente que sí me quería. Pero lo cierto es que poco antes de que sucediese, me di cuenta de que me estaba enamorando de ese chico al que conocí muchos meses atrás.
Cuando me di cuenta de que me estaba empezando a enamorar de él, empecé a escribir cosas que me afectaban de él, de manera positiva y negativa. Hoy, cuando lo leo, se me saltan las lágrimas leyendo frases como ‘’Ojalá me enamorase de otro para olvidarte’’, y aún con todo lo malo que me ha hecho y la cantidad de noches llorando que he pasado, sigo enamorada de él. Siento que sería capaz de hacer cualquier cosa por él, y lo más triste es que mi sensatez me dice que estoy loca, que estoy loca por continuar permitiéndome sentir todo esto, y que en el fondo, sé y reconozco, que una parte de mí piensa que nada de esto merece la pena y que debería abrirme a otras posibilidades.
tumblr_n4t7vrFD641t1q6klo1_500
¿Pero cuales? No hay más posibilidades… Este chico ha demostrado interés por mí de manera física, sexual e intelectual. Sabe cómo son mis michelines, cómo es mi cara de recién levantada, y aún así siempre me dice cosas bonitas y me da muestras de deseo. Él quiere ser mi empotrador y yo quiero que lo sea. Hoy me he preguntado a mí misma ¿No tienes la sensación de que te agarras a él como a un clavo ardiendo, por el simple hecho de que él, quiere tener sexo contigo? Y en el fondo, lo más triste, es que creo que realmente pienso eso. Que como es el único chico que me ha demostrado, aún después de un año de conocernos, que sigue deseándome y que quiere empotrarme… pues me niego a mí misma el dejarle escapar.

Puede que lo que estoy escribiendo no tenga mucho sentido, pero necesitaba compartirlo aquí, con vosotros y con vosotras. Y a veces leo vuestros relatos y artículos, y pienso en que muchas veces me siento identificada, y en que otras, cuando son relatos con final feliz, siento una envidia sana, pero envidia. Quiero ser feliz, y creo que he perdido ya el camino de la felicidad. Me siento perdida, y no sé qué tengo que hacer. No tengo la suficiente confianza en mi misma como para ligar cara a cara con nadie, no se me da bien. Sólo sé que no quiero estar siempre sola, quiero saber lo que se siente al amar y ser correspondido, y no hago más que repetirme que eso nunca lo conseguiré.

Anónimo.