25 años, graduada en derecho, trabajo y me preparo unas oposiciones, he salido y entrado como me ha dado las gana desde que tengo 16 años, tengo una salud de hierro y una vida feliz. Soy una mujer normal y corriente, con grandes miras y expectativas hacia mi futuro. Pero oh… ¡sin novio!
Hace unos meses en una fiesta, una familiar me preguntó: «¿cómo van tus asuntos amoroso?» a lo que yo respondí que directamente no había asuntos amorosos, ni tenía tiempo, y tampoco había alguien con la suficiente paciencia de aguantar a una chica, que literalmente tiene 1h libre al día. Para mi sorpresa, la respuesta de esta persona fue una pregunta que desde entonces me ha hecho replantearme muchas cosas: «pero… ¿te gustan los hombres?».
Magnífico, extraordinario, excepcional, asombroso… Si una mujer de 25 años, con una vida que va a 1000km/h, que sale con sus amigas y que su mayor preocupación es acabar la semana cumpliendo sus objetivos, no ha presentado novio en sociedad o simplemente no ha tenido uno, la cuestión más lógica es replantearse la sexualidad de ésta.
Claro que sí y después nos jactamos de decir que no se trata igual a un hombre que a una mujer, que la talla no importa, que el físico es lo de menos… Pero, eh amiga, si no tienes novio y no lo has tenido nunca, agárrate y plantéate hacerte lesbiana, porque no es normal que una mujer como tú se pasee por la vida sin un hombre a su lado, que te podrá querer y apoyar, o bien puede ser un obstáculo en tu vida y tu carrera… Replantéate tus opciones y tu futuro. Corre, que Bridget Jones aparece en su nueva película embarazada, y tu amiga mía, estas soltera y se pasan tus mejores años de fertilidad.
Sinceramente, no soy una mujer especialmente segura de mi misma y al principio me preocupé por aquella pregunta. Pero después comprendí que el mayor problema no soy yo, sino la mujeres (y remarco, MUJERES) que plantean este tipo de cuestiones. A lo mejor solo ha sido en mi experiencia, pero este tipo de preguntas siempre me han caído de mujeres.
Me gustan los hombres, de momento nunca me he sentido atraída por una mujer, y si lo hiciera sería una cuestión (que no un problema) mío y sólo mío. Me preocupa mi futuro profesional, las relaciones sentimentales ocupan un lugar muy bajo en mi lista de cosas importantes. Y prefiero una cena con mi familia o una buena copa de vino en una terraza bonita con mis amigas, que una cita con alguien que no entienda cuales son mis prioridades en la vida.
Jamás, jamás, os dejéis llevar por las reglas que imponga una sociedad anticuada, o las que se imponen en tu círculo social, que mal denominamos «lo normal». Somos personas, tanto hombres como mujeres, libres, capaces de decidir lo que queremos en nuestras vidas y el resto… el resto nos debe dar igual.
Firmado: BF.
