Y me avergüenzo de ello.
Suelo leer textos en los que ellos se portan mal con ellas, que dejan de contestar a los mensajes, que desaparecen y que las tratan como basura. Pero pocas veces he podido leer alguno en el que una mujer diga que fue ella la que trató como basura a un tipo. Y esa soy yo.
Cabe destacar que de aquellas tenía 23 años, que mi vida amorosa había sido un circo de los horrores y que venía muy quemada (excusas que me permiten dormir mejor y que justifican, no, lo que hice). Mi ex me pegaba, me engañaba y yo sabía que aquello estaba mal, pero mi autoestima de mierda era demasiado baja para poder reaccionar. Un empujón por las escaleras y una escayola más tarde, puse fin a aquello (en realidad fueron mis padres). Me costó bastante reponerme, creí que lo hacía, pero he tardado 8 años en conseguirlo de verdad.
En este tiempo he estado con varios chicos (parejas estables y muchos rollos), encontrándome con verdaderos príncipes que te tratan como nadie y que tú, por tus mierdas, acabas tratando como una vez lo hicieron contigo.
He quedado con tíos de Internet y les he dejado tirados en la cita al verles en persona, he follado con hombres solo porque me picaba el chumino y me he ido de su lado marcándome un Houdini. He tenido parejas que lo han dejado todo por mí, mudándose a mi ciudad, y al tenerles a mi lado me ha dado el canguelo y les he dejado. He puesto los cuernos sin motivos, solo porque me apetecía algo nuevo. He dejado de contestar whatsapps, he bloqueado, he desaparecido y he reaparecido cuando me apetecía follar.
Pienso en ellos contando lo que les había hecho, imagino las conversaciones con sus amigos, con su familia, todos llamándome hija de puta y mala persona, y me lo merezco. Yo y solo yo tuve la culpa. No estaba preparada para estar con nadie, no me conocía como lo hago ahora, no sabía lo que quería porque ni yo sabía escucharme. ¿Miedo a la soledad? Tal vez. Daba la patada antes de que me la dieran, causaba daño antes de recibirlo. No-me-gustas-lo-suficiente pero es mejor sentirse querida que jodida.
Hace casi tres años que me he recuperado de aquella relación tan chunga. Hace casi dos años que conocí a un chico maravilloso que me lo quería dar todo y con el que fui sincera antes de hacerle daño, porque no me gustaba lo suficiente y porque no me valía el sentirme la reina de nadie. Aprendí que solo yo puedo hacerme sentir como una reina y que solo yo puedo conseguir calmarme y hacerme sentir todo lo bien que me merezco. He aprendido a respetarme, a quererme y a saber escucharme.
Sigo conociendo a hombres y, sorpresa, me han puteado. Mis amigas siempre me dicen “con lo buena tía que eres no mereces que te traten así”. Después de lo que he hecho sé que todos tenemos nuestros motivos para hacer daño, nunca están justificados, pero sí pueden explicar comportamientos tan jodidos. Porque el ser humano es así, bueno y malo, egoísta por naturaleza y con un serio problema de yoísmo. A algunos se nos nota más que a otros, pero todos tenemos la habilidad de infundir dolor solo por existir.
He entendido que la sinceridad es la base de todo, que si alguien no te gusta lo suficiente es mejor decirlo y no forzar las cosas, que si ves que esa persona no te va a agradar porque tiene una característica física/mental que no te cuadra, es mejor ni quedar. He aprendido a que haciendo daño a los demás me lo hago a mí misma, y que se nos da tan bien juzgar que nos olvidamos de toda la mierda que todos guardamos en algún aspecto de nuestra vida. He aprendido que hasta que no te quieres a ti mismo, no vas a poder querer bien a nadie… así que empieza a quererte, el resto llegará solo.
Autor: Anónimo.
Imagen: backwallpapers.com
