A pesar de los indudables beneficios del sexo (aparte se ser divertido a rabiar, me pone piel de hada), la aquí presente ha casi renunciado a los “follamigos”.

No solamente porque haya decidido decir que no al banquillo, sino porque siempre he tenido la estúpida idea de que alguien a quien te follas también merece (Oh, locura) ciertos tipos de respeto mínimo (de ese que dice la leyenda, se brinda a las personas).

CGBOvNHWgAEZA5n

Introduzco una anécdota:

Estaba yo de fiesta hace unos años con los colegas, y con mi follamigo de entonces (lo había invitado con claras intenciones de “ñiqui-ñiqui-post-juerga”), llevábamos un rato de risas y copas, cuando se puso a intentar ligar con una tía a medio metro textual y exacto de mí.

Aquello me sentó como una patada, pues:

  1. A) Tengo ego.
  2. B) Estoy justo AQUÍ, tío.
    1. Y más importante, puede que no seas mi novio, pero si he salido contigo es PORQUE HOY FOLLO, o sea, YO.
    1. Soy una PERSONA, no un desahogo si la otra dice que no.

Puede que haya gente con follamigos, pero no debería ser lo mismo que el “tele-polvo”; lo cual me lleva al segundo punto:

Estamos para follar, vale, de acuerdo, pero:

  1. A) No estamos para follar sólo cuando TÚ QUIERES. Yo también quiero coger el teléfono con la certeza relativa de que echaré un polvo en un futuro próximo.

A.1) ¿Qué es esa mierda de desaparecer durante dos semanas (y no cogerme el teléfono, porque “total, nosomos pareja, no te tengo que dar explicaciones”) y reaparecer mágicamente cuando a TI te viene mejor un repasillo?

  1. B) Follar es FOLLAR, oseasé que tampoco vendría mal un pequeño interés en que YO me corra también, ¿No?. No soy una muñeca hinchable, darling.

Coger el teléfono y llamar a alguien para follar (de quien no te importa nada salvo cuando lo necesitas), quedar cuando tú quieres y como quieres, hacer lo que te apetezca y disfrutar sólo tú, es una actitud completamente respetable, que puedes llevar a cabo “sin faltar”, siempre que pagues la tarifa correspondiente de alguien que se dedique a ello: prostitut@s.

¿Por qué? Porque no están contigo porque les gustes sino porque pagas, y si quieren alguien que los empotre, seguro que lo consiguen: ES TRABAJO.

ventajas- follamigo

Quizás no sea el mejor ejemplo… Tío, si quieres un café vete a un bar (o a los bares que quieras **guiño-guiño**) y págalo; pero cuando te invite la casa, lo mínimo que debes hacer es ser agradable.

Flor Igielski